Capítulo 24 - Ínoli

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He estado los últimos minutos perdido en mi mente, en realidad es muy sencillo, una parte de mí le gusta imaginar un sinfín de situaciones, a veces muy irreales, pero es divertido, por ejemplo creer que poseo alguna habilidad como distorsionar la realidad, ver los coches pasar y sentir que puedo elevarlos por el aire con la misma facilidad con que lanzo una moneda, distorsionar el tiempo y el espacio para regresar y caminar unos años atrás o simplemente viajar al lugar más alejado y tranquilo posible.

Pasaron veinte minutos siendo un héroe de Manga y el numero en el tablero no cambiaba el turno para el pedido que había hecho, cansado de destruir carros a través de la ventana decidí que era hora de levantarme y preguntar cuando una chica bien parecida y de sonrisa muy linda se acercó con dos helados, pidió disculpas por la tardanza pues se encontraban un poco apretados por la falta de personal, en cuanto se dio la vuelta y caminó de regreso hacia la barra fue el momento indicado para usar otra habilidad y ver todo en cámara lenta, solo conseguí sonreír conmigo mismo.

— Este tipo de festejo si me gustan — Ana comenzó a bailar un poco sentada en su lugar, moviendo los brazos extendidos con los ojos cerrados.

— No espero un chiste de esto, solo come.

— El señor enamorado de repente se convierte en un ogro — Ana le dio un par de vueltas a la cuchara para acomodar su helado.

— Precisamente de eso estaba hablando — di el primer bocado y fruncí los labios.

— Salir medio año con alguien debería significar algo, ¿no?

— Más de lo que hubiera imaginado.

— ¿Imaginaste que las cosas serían diferentes? — a veces es desesperante la paciencia y delicadeza con la que ella come las cosas.

— Con todo lo sucedió mientras nos conocíamos realmente es que no tenía la menor idea de lo que podía pasar — hice una pausa para recordar un poco — aún hoy en día tengo algunas dudas sobre ello.

— ¿Te refieres a los sueños y las visiones?

— En parte, se detuvieron, pero a veces me pregunto simplemente la razón.

— Tal vez solo fue una etapa, producto de emociones nuevas, quizás el hecho de sentirte por primera vez inseguro en algo te afectó mucho.

— Puede ser — suspiré — solo hay uno en especial que he tenido unas cuantas veces desde entonces, el dialogo es el mismo y la conversación la inicio yo.

Recordé la escena una vez más, no tan clara realmente, tengo la seguridad que es una tarde nublada adornada con un frio lúgubre, caminamos y luego nos detenemos, mi subconsciente dibujó de nuevo el clímax de la escena donde Ínoli y yo conversamos.

"— Tenía derecho a saber lo que estaba ocurriendo.

Entiende lo difícil que es tratar de no romper una promesa Eriol.

— ¿Y la mentira era la solución? silencio por varios segundos.

Si crees que ha sido sencillo para mí estás muy equivocado.

No tenías que hacerlo de esa manera.

Quiero que me digas que hubieses hecho en mi posición a lo lejos retumba el primer relámpago.

No haber creado un mar de alegría con un hueco enorme al fondo.

Entonces al final de todo soy una mentirosa.

Solo haz lo que tienes que hacer, no habrá un final feliz.

Eriol lo lamento, si pudiera cambi...

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