Capítulo 12 - Malteada

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Me encontraba aún con uno que otro suspiro ahogado, navegar en este mar es tan complicado, encontrar la calma ante la tempestad que ocasiona su mirada y el diluvio de sensaciones involuntarias por dentro al estar tan cerca hacen que mi cordura quiera arrojarse por la borda, nada parece tangible en esta extraña relación entre Ínoli y yo, tristemente lo único real en este momento son las gotas de la regadera recorrer mi cuerpo, cierro la llave y me sumerjo de a poco en la tina, dejo la mitad de mi rostro fuera a la altura de mis labios, siento calma al mismo tiempo que nublo mi vista cerrando los parpados, me pregunto la razón por la cual se me niegan tales emociones cuando se trata de ella, todo permanece en silencio hasta escuchar el sonido de una notificación nueva en mi celular que dejé sobre una de las repisas encima de mi toalla, abro los ojos y ligeramente soplo provocando un burbujeo en el agua, los sonidos continúan y entonces decido que es hora de salir. La paz en el cuarto de una noche de fin de semana es patrocinada por la nueva adquisición de mi hermano, unos audífonos de diadema y micrófono con los que puede jugar completamente a gusto, gracias a esto puedo concentrarme en cualquier otra cosa que quiera hacer, lo observo por un momento al mismo tiempo que trato de terminar de secar mi cabello con una mano y con la otra observo las notificaciones, camino hasta el cajón donde tengo mis playeras y escoger una, pero los mensajes de Iván me distraen, me siento en el borde de mi cama para contestar.

-Noticias nuevas y frescas mi joven padawan

-Que dices??

-Primero me encargas una tarea que tú debías tener resuelta y ahora lo olvidas?

-Conseguiste el num de Rose??

-Mejor aun!!

-Que pasa?? :o

-Conseguí una cita con su amiga!!

-Joder amigo... tienes el num??

-Oh si... eso, lo tengo ;)

-Vale, te debo una

-No te preocupes, me cobraré con su amiga uwu

-Solo no me metas en tus lios...

Tomé el contacto de Rosemary y lo agregué, ahora podía enviarle un mensaje, mis pulgares se detuvieron en cuanto vi su foto de perfil, toqué la imagen para poder verla mejor, la conciencia nuevamente me torturaba trayendo consigo su imagen en el parque usando aquel lindo vestido, pero por error al querer cerrar su foto apreté el botón para realizar una video llamada, de inmediato entré en pánico y simplemente cancelé soltando en la cama el celular mientras me reclamaba lo idiota que era, ya me encontraba calmado cuando el sonido y la pantalla iluminada que indicaban una nueva video llamada me distrajo, era Rose, no sabía que hacer a la par de mis nervios devorándome, volteé a ver mi hermano quien seguía en lo suyo así que no sería un problema, al final terminé aceptando.

-Ho... hola Rose – me regalaba una dulce sonrisa, su cabello recogido me permitía ver sus aretes negros en forma de hojas.

-Oh... - hizo una pausa sorprendida – no recuerdo haber pedido un stripper – abrió en grande sus ojos.

- ¡Carajo! – recordé al instante que no me puse una playera, solté el celular y me paré a tomar la primera que viera en el cajón, una vez puesta agarré de nuevo el celular – lo siento... - echó a reír un poco tapando su boca con una de sus manos.

-Vaya manera de saludar que tienes... – volteé hacia un lado y entrecerré los ojos, podía sentir el bullying que se me venía encima – ¿o es acaso la manera de enmendar las cosas?

- ¿Sirvió de algo?

-Tal vez... - guiñó su ojo derecho y colocó su rostro sobre la palma de su mano, pareciera estar en un escritorio.

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