Por siempre seré tu pecado [Hanma Shuji x OC] EDITANDO !!

Capítulo XVIII

“¿Por qué estás tan cerca?”

Nota: Capítulo narrado en el año de 2004.

No podía creerlo en lo absoluto, en el día en el que presentaría su examen más importante se despertó tarde y ni hablar de su hermano pues él también se despertó tarde.

Corrió fuera de casa acomodando bien su falda y revisando que no le faltara nada. Estaba a punto de bajar pero su hermano la detuvo haciendola correr hasta el elevador.

—Mamá me matará si se entera que nos fuimos en moto a la escuela.

—No tiene porque enterarse, te compraré algo como compensación.— Chilló sintiendo la cabina del elevador bajar con su velocidad normal, estaba más que desesperada. —¿Pero y si no llegó? ¿Y si se me hace tarde?

El mayor golpeó su cabeza con suavidad sin mirarla, negando. —Sí vas a llegar, sólo cállate porque me vas a comenzar a poner nervioso.

Apenas el elevador llegó al primer piso fueron corriendo hasta donde la motocicleta de Keisuke estaba estacionada, no tardaron nada en llegar pues en el momento que estuvieron frente a esta se subieron, quedando el mayor frente al volante y su hermana detrás de él. Kyoko se sostuvo bien para que su hermano pudiese manejar rápidamente.

Ambos traían puesto el casco, no querían que pasará algo grave si estaban sin el casco puesto.

—Kyoko.— Él llamó su atención, por lo que ella le miró como pudo. —¿Desayunaste antes de salir?

—No tuve tiempo de hacerlo.— Rió con algo de verguenza, observando como el mayor le dedicó una mala mirada a través del espejo retrovisor. — Deja de mirarme así, es obvio que no podría haber desayunado nada.

—¿Ni siquiera bebiste el yogur que mamá dejó para ti?— No recibió respuesta alguna, ella incluso dejó de mirarlo. —¡Debes dejar de ser tan distraída en las cosas y prestar atención a lo que te dice la gente!

—No soy distraída, es sólo que, uh...— El silencio empezó, ya no tenía ni idea de que decir.

Keisuke suspiró. —Espero que al menos hayas traído dinero para comprarte algo.

—Siempre estoy preparada con dinero.

—Pero no estás preparada con la comida.

La menor ni siquiera tuvo tiempo de responder, pues finalmente habían llegado al instituto de Kyoko, ambos se quitaron el casco y ella bajó casi corriendo, dejando lo que portaba en la cabeza detrás de su hermano. Se acomodó bien y besó la mejilla del mayor, cómo era costumbre, aunque en realidad lo hacía para molestarlo pues adoraba ver su cara de disgusto.

—¿Quieres que venga por ti más tarde?

—No no.— Habló alejándose poco a poco de él, estaba incluso caminando de reversa. —Iré con Nanami a la plaza después de clases, igual te llamaré.

Finalmente se despidieron con la mano, Kyoko continúo corriendo hasta la entrada escuchando como la moto de su hermano se iba a una velocidad moderada. Al entrar corrió con más rapidez hasta su aula, incluso estuvo a punto de caerse en las escaleras y agradecía que absolutamente nadie la hubiera visto. No tardó mucho en llegar a su aula y tocó la puerta, abriéndola un poco.

Asomó su cabeza en la puerta, ya todos estaban en clase y maldijo para sí misma. —¿Puedo pasar? Se me hizo tarde.

—Espere a su siguiente clase, Baji.— Y sin más, ella cerró la puerta maldiciendo nuevamente.