¿Alguna vez soñaste trasmigrar a tu novela favorita?
Para nuestro protagonista había dejado de ser un simple sueño pues al atragantarse y desmayarse, terminó ocupando el papel de un personaje importante de su novela favorita.
Pero para su mala suert...
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La primera batalla entre Neoland y Dreamland terminó con la victoria de Neoland pero a pesar de eso, durante los siguientes meses Dreamland siguió atacando a Neoland, había veces que eran ataques sorpresa y otras veces los superaban en número, a veces Neoland ganaba y otras veces Dreamland.
Era una batalla sin fin o eso parecía.
Neoland poco a poco perdía ventaja, la cantidad de guerreros disminuía por cada ataque que recibía y aunque llevaba a ciudadanos normales y los superaban en número en la batalla, poco a poco perdía ventaja.
Se esperaba que en varios meses Dreamland lograra derrotar a Neoland.
El Devorador de Almas al ver que perdía el control y su deseo de reinar Dreamland se alejaba cada más, decidió tomar medidas drásticas.
Un Devorador de Almas era una de las criaturas más peligrosas y fuertes en ese mundo, para evitar perder hizo uso de su control y poder para "adiestrar" a las demás criaturas peligrosas.
Entonces, Dreamland no solo se comenzó a enfrentar a los guerreros de Neoland, también se enfrentaban con ogros, cíclopes, gárgolas e incluso a veces al único dragón negro que existía, que no se había extinguido y del que nunca supieron de su paradero.
Desde que Dreamland le declaró a Neoland la guerra supieron que había algo extraño en Jaemin, había maldad pura en alguien que lucía inofensivo pero nunca creyeron que sería alguien tan fuerte como para poder poner a todas esas criaturas peligrosas luchando de su lado.
En especial al único dragón que existía: el dragón negro, despiadado por naturaleza, devastando todo a su paso pero que sin duda sus ataques eran los peores. Usaba un ataque poderoso que cubría los cielos de obscuridad, momento que usaban de ventaja para pasar inadvertidos y atacar.
Y así, los papeles se invirtieron y Neoland volvió a seguir tomando el control.
Esa noche había sido la primera vez que Neoland iniciaba primero el ataque hacia Dreamland por lo que el ambiente se sentía pesado por la gran batalla que se estaba dando a las fronteras de Neoland, a casi seis horas del Palacio.
Jaemin estaba acostado sobre el escritorio, toda la biblioteca era un desastre, los libros estaban tirados por todos lados e incluso había una ventana rota cuando lanzó un libro sobre esta al no encontrar respuesta.
Habían pasado dos años y no podía encontrar la manera de volver a su mundo original, había buscado por los miles de libros en la biblioteca real pero no había respuesta alguna.
Se rindió y aceptó su destino incluso. Esa había sido la razón por la que había sido la primera vez que atacaba al país enemigo.
Miró la carta que había escrito antes de estirar su mano a un costado y quemarla en la llama de la vela.
Unos pasos rápidos se acercaron hacia la habitación.
—Su Majestad...— habló un sirviente. Parecía agitado.