Si las noches anteriores no había podido dormir, está fue peor... Saber que su Deku estaba en la habitación de enfrente, solo con un pasillo entre ellos lo ponía ansioso. Sobre todo porque ahora no solo se sabía correspondido, sino que además tenía el permiso del pecoso para poder acercarse tanto como quisiera... Eran novios, y eso en su diccionario personal significaba que podía besar y acariciar todo lo que quisiera...
Suspiró con alivio cuando su alarma sonó, ya no podía estar más tiempo en su cama. Se levantó de un brinco acomodando su uniforme, sabía que no lograría estar en paz y prefirió vestirse y esperar pacientemente la hora de levantarse.
Llevaba uniforme de deportes, no le molestaba para nada, era más cómodo. La clase tampoco le desagradaba, se divertía viendo a los inútiles de sus compañeros rogarle a Aisawa por piedad para que los dejara descansar. El y Shoto no tenían ningún problema, estaban más que en forma, y se pasaba las horas burlándose de todos... Pero ahora... ¿Y si Deku también sufría por la clase?...
- Maldición, tendré que mantener las burlas al mínimo... - suspiro resignado al ver su diversión arruinada.
Bajo rápidamente a esperar a Izuku para desayunar, pero se detuvo en seco al llegar al umbral de la cocina. Izuku estaba de espaldas, al parecer preparando algo, pero eso era lo de menos... También llevaba el uniforme de deportes, solo que a él le quedaba malditamente bien.
El pantalón se pegaba a su cuerpo marcando sus piernas y su perfectamente redondo tracero y la playera estaba ajustada a su cuerpo, delineando su cintura. En su cuello relucía el collar que siempre llevaba, era el toque perfecto para resaltar su delgado y delicado cuello.
Casi salta sobre él cuando se agachó buscando algo en el gabinete de abajo. Se deleitó viendo el hermoso tracero que formaba un lindo corazón en esa posicion... Desvió la mirada y trato de pensar en otra cosa, aunque le parecía una blasfemia cambiar esa perfecta vista por algo más. Pero se dió cuenta de que estaba completamente duro y el pantalón comenzaba a molestarle.
Cerró los ojos y busco algo en su mente. Recordó un día que se suponía saldría con Shoto, pero su estúpido padre lo llamo y se tuvo que ir. Llegó temprano a su casa y encontró a sus padres en el sillón de la sala...
Ok, eso funcionó muy bien, sintió un escalofrío de desagrado en el cuerpo y respiró profundo. Bloqueo de nuevo ese recuerdo y miro a Izuku que seguía distraído sin notar su presencia.
Se acercó en silencio y deslizó sus manos por su cintura, logrando que Izuku diera un salto, asustado por la cercanía.
- ¿Por qué mierda se te ve tan jodidamente lindo el uniforme? - susurro en su oreja mientras dejaba una suave mordida en su lóbulo.
- ¡Kacchan! ¡No hagas eso! - le reclamo Izuku. Se giró y lo aparto un poco con las mejillas completamente rojas.
-Nunca ese uniforme me había parecido tan jodidamente perfecto, hasta ahora... - dijo mirándolo de arriba a abajo con una sonrisa de lado.
- ¿Se-se ve bien? - pregunto desvíando la mirada, apenado - cuando fui a pedirlo todas las tallas para hombre me quedaron enormes, así que me dieron uno para chica. Me dijeron que después mandarían traer alguno a mi tamaño, pero tardaría. Así que por un tiempo tendré que usar este... - dijo poniendose aún más rojo, sin mirar a Katsuki a los ojos.
- Ojalá jamás encuentren tu talla... - dijo acercándose más y levantando la cara del peli-verde con suavidad.
Juntó sus labios con lo suyos, moviéndolos con necesidad, apretando sus brazos a su cintura y pegándolo a su cuerpo. Profundizó el beso, metiendo su lengua a la boca del pecoso que le correspondió en el momento. Lo levanto entre sus brazos y lo sentó en el gabinete acomodándose entre sus piernas.
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Metro Y Medio (KatsuDeku)
FanfictionTantos hogares y tantas escuelas en el país y debía estar en los suyos... Eso sí era mala suerte... Odiaba compartir su espacio en casa y la escuela, lo odiaba de verdad... Lo peor era que ver sus ojos todos los días no le molestaba como debería... ...