Mío

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Despertó en el trayecto a casa, escucho las voces de Masaru y Ochako que conversaban en los asientos delanteros. Ella le hablaba sobre los juegos mecánicos y que se estaban divirtiendo, pero que en un momento el se había mareado y sentido mal, por lo que se desplomó sin más. Afortunadamente ya se habían encontrado con un profesor de la escuela que casualmente estaba ahí, así que Ochako le pidió ayuda y el los llevo al hospital... Si que era buena inventando historias, y muy convincente para contarlas...

Prefirió fingir seguir dormido, no quería dar explicaciones, sabía que Mitsuki estaría preocupada, pero prefería aclarar su mente antes de intentar confirmar la historia de Ochako.

En cuanto llegaron a la casa sintió como era cargado y escuchó la voz preocupada de Mitsuki. Lo subieron de inmediato a su habitación y sintió como le quitaban la ropa con cuidado y lo arropaban bien. Le sorprendió sentir un par de besos en la frente y después escuchó como se cerraba la puerta.

Suspiró y al fin pudo dejar caer las lágrimas que peleaban por salir, enterró la cara en la almohada y comenzó a llorar de nuevo.

No supo si fueron horas o minutos, pero en un momento sentía que ya no podía llorar más, sus ojos estaban muy hinchados y cansados, ya no salían mas lágrimas, parecía que se le habían acabado.

Intentaba hilar sus pensamientos, entender lo que había pasado... y no lo lograba, solo podía ver en su mente a ambos besandose... Shoto besando a Katsuki... Su amigo, a quién realmente apreciaba y apoyaba... y su novio, a quien le entregaba todo de si... quién le juraba amor todos los días...

No entendía por qué... Que había hecho para que lo traicionaran así... Y se dió cuenta de que en realidad no había hecho nada... ¿Por qué se culpaba cuando lo único que había echo estos meses había sido confiar en ellos?

Eran amigos desde antes de que el llegará, ya pasaban tiempo juntos, y al parecer el llegó para arruinar lo que habría pasado entre ellos, si no hubiera llegado estarían juntos, todo habría estado bien...

Pero...

El no hizo nada para que Katsuki se fijara en él, fue Katsuki quien se acercó, quien lo busco...

¿Shoto se estaba confesando?... ¿Entonces no es como si tuvieran una relación o Katsuki lo estuviera engañando?... No escucho su respuesta... ¿Era Shoto quien lo besaba?...

Katsuki y el siempre salían juntos, en casa pasaban todo el tiempo solos y cuando ellos salían siempre era con alguno de sus amigos, y estaba seguro que ninguno pasaría por alto si algo hubiera pasado entre ellos, confiaba en que le dirían si ocurriera algo..

Pero... y si en realidad Katsuki quería estar con Shoto, y si en realidad su amigo le atraía y el solo había sido una distracción... Algo nuevo que llamo su atención un momento y ahora tenía la oportunidad de estar con quién en realidad quería...

Ya no quiso pensar más, había muchas ideas en su cabeza y no sabía cuál era la correcta. Cerró los ojos y sintió un fuerte dolor en la cabeza, estaba cansado y harto de darle vueltas a todo.

Se dejó llevar por el cansancio y poco a poco se quedó dormido con el ceño fruncido y lágrimas secas en las mejillas...



Por la mañana Mitsuki había ido a verlo, pero seguía dormido, no lo molestó, lo dejo descansar. Debían salir, asi que le dejo una nota en su habitación. Sabía que Katsuki se quedaría en casa de su amigo después de la fiesta, pero no había contestado el teléfono, así que le envío mensajes y le dejo una nota también en su puerta.

No querían dejarlo solo, así que Masaru y ella hablaban decidiendo qué hacer cuando escucharon la puerta y vieron a Katsuki entrar, pero se preocuparon aún más al notar los golpes en su rostro.

Metro Y Medio (KatsuDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora