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Octubre...

Al fin octubre...

Eijiro no cabía en sí de la emoción, no sabía que haría primero... Festejar... Obtener su identificación de mayoría de edad... O cogerse a Denki hasta la inconsciencia en algún hotel ya sin la necesidad de esconderse... Sin embargo el rubio le había dicho que, aunque le gustaba la idea, aún era su profesor, Eijiro por fin era mayor de edad, pero seguían con el problema de la posición maestro-alumno.

Así que completamente decepcionado optó por esperar lo que fuera que decidieran los demás.

No tardaron nada, era el primero en cumplir la mayoría de edad, así que decidieron festejar, sin embargo sólo sería una fiesta con los amigos más cercanos. Momo había ofrecido su mansión, pero todos coincidieron en que les sería imposible pagar si algo se dañaba, así que Katsuki ofreció su casa, aún tenía la sensación de pagar de alguna manera el que le haya ayudado a hablar con Izuku cuando pelearon, ya habían pasado un par de meses, y decidió de alguna forma pagar esa deuda.

Se organizaron rápidamente, Mitsuki y Masaru aceptaron encantados y dijeron que saldrían ese fin de semana para darles un poco de libertad. Izuku pregunto que harían y ambos solo se miraron y dijeron que irían al dentista. Izuku los miro extrañado, volteo y vio a Katsuki que tenía una expresión de espanto y estaba seguro de haber visto un temblor en su ojo.

Katsuki no quiso responder cuando le pregunto, en su mente aún estaba la tarde que regreso de la fallida salida con Shoto, se suponía que sus padres no estarían por que irían al "dentista" y al regresar temprano encontró a sus padres en la sala desnudos y haciendo algo que se forzaba por olvidar. No quería traumatizar a Izuku también.

Unos días antes de la fiesta Izuku decidió ir a ver a Denki, ya les había dicho que estaría ocupado y no podría festejar con Eijiro como deseaban, aún así el pecoso quería que estuviera ahí, todos en la escuela sabían que se llevaban muy bien con su profesor y no pensó que sería extraño que fuera al cumpleaños de uno de sus estudiantes. Además sería un exelente regalo para Kiri.

Llegó al salón de profesores, nunca había ido, y le resultaba extraño, pero rápidamente distinguió a Denki,estaba sentado sobre un escritorio hablando con alguien animadamente.

Se acercó y lo saludo con la mano desde la puerta. En cuanto lo vio Denki sonrió y salto del escritorio saliendo rápidamente y cerrando la puerta detrás de él.

- ¡Izu! Hola, nunca te había visto por aquí ¿A qué debo el honor? - pregunto con una sonrisa.

- Se que ya le habías dicho a Kiri que no podrías ir a su fiesta, pero de verdad quiero rogarte que vayas, sería una gran sorpresa para él, es su día y no estaría completo sin ti ahí ¡Por favor, por favor! Prometo ayudarte en lo que necesites después, también arrastrare a Kacchan para que haga algo por ti ¡Por favor di que si! - suplico el pecoso poniendo su mejor cara de súplica.

Denki lo miro con una sonrisa, no podía decirle que no a esa carita.

- Bien, solo por que de verdad eres convincente - dijo apretando su mejilla con cariño.

Se escuchó ruido adentro y pasos hacia la puerta, Denki tomo la perilla rápidamente impidiendo que la abrieran.

- Bien, debo regresar, pero dame los detalles por mensaje ¿De acuerdo? Nos veremos - dijo sonriendo y empujó la puerta entrando rápidamente.

Izuku no supo que hacer, fue extraño, pero supuso que estaba muy ocupado. Se dió la vuelta para volver a su salón cuando recordó que llevaba la invitación impresa con toda la información. Era mejor dársela, ya estaba ahí.
Toco la puerta y está vez abrió un chico alto, delgado, de piel pálida y con un curioso cabello morado que hacía juego con sus ojos, se veía serio y algo cansado, por un segundo le recordó a su profesor.

Metro Y Medio (KatsuDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora