EL REY DE LAS MENTIRAS

EL GRAN BAILE

La princesa se quedó estática unos segundos hasta que escuchó la voz de Millie quien le pellizcaba el brazo para que reaccionara, la misma observó cómo cada uno de los invitados portaba antifaz colocándose ella el suyo propio.

-Veo que tu estúpida novia rubia no reacciona. -

Dijo la dama haciendo que Charlotte se enfadara levemente.

-No, es solo que me detuve a pensar, creo que es algo que no conoces ya que nunca te detienes a pensar siquiera un poco-

Dijo la joven yéndose a recibir a los demás invitados, cada uno con trajes estrafalarios y pomposos, entre tantos vestidos, pudo notar uno color rosa que destacaba del resto.

-Angel-

Dijo la joven corriendo a los brazos de su amigo y hermano de quien siempre la vestía y cuidaba.

- ¿Molly no ha llegado? -

Angel negó con la cabeza, la misma suspiró, adoraba tener a alguien humilde con quien hablar, pronto con un vestido en tonos grises llegó Vagatha, con su cabello levemente recogido, Charlotte la recibió con un enorme abrazo mientras Angel se queda mirándole completamente atontado.

-Te ves hermosa Vaggs-

Dijo Charlotte abrazando a su querida amiga y consejera.

-Gracias querida, lo mismo debo decir de ti. -

Dijo con un leve sonrojo en sus mejillas, para nadie era secreto de que a Vaggie le atraía la hermosa princesa, es decir ¿a quién no?, pronto el rey llegó al trono que se encontraba al final del salón principal, Charlotte se apresuró a llegar al lado de su padre, los presentes pusieron total atención a Lucifer quien abrazaba con eterno cariño a su hija.

-Buenas tarde mis leales súbditos, agradezco que como cada año estén presentes en esta celebración traída a ustedes por mi dulce y bella hija Charlotte además de mi hermosa y exótica esposa Lilith, sin más les dejo para que gocen y se diviertan. -

Pronto el baile comenzó, Seviathan extendió su mano hacia Charlotte, para luego inclinarse levemente hacia ella invitándole a bailar, pero, de un pronto a otro las puertas se abrieron, dejando ingresar a aquel visitante que llegaba de manera tardía junto a su "hermano", la música se paralizó uno segundos mientras todos observaban con temor aquellos ojos color café los cuales casi se veían como rubíes, el mismo se presentó.

-Buenas tardes, felicidades en su cumpleaños mi señor-

Dijo tomando una de las copas que le otorgaban los sirvientes del castillo.

-Mucha prosperidad y larga vida-

Dijo para luego beber el contenido de aquella copa, mientras en la cabeza del joven pelirrojo rondaba "larga vida para sufrirla cuando me lleve a su hija y destruya tu imperio".

-Emm sí, larga vida-

Dijo Moxxie algo nervioso, a veces se sentía muy inseguro con Alastor, a veces hacía cosas fuera de lo planeado como eso que había dicho, pero era de esperarse que la felicidad del rey molestara al joven luego de haber sufrido por años la pérdida de su madre, pronto la fiesta continua, Seviathan iba a volver a invitarla cuando de pronto el joven de cabellos rojos se le adelanto.

-Hermosa dama ¿me concedería por favor el honor de su compañía en esta pieza? -

La joven agradecía la poca luz de aquellas velas o se moriría en vida si él la viere sonrojada, la joven se inclinó levemente mientras Seviathan sonreía con suficiencia esperando la negativa de su querida prometida.

-Claro, me gustaría acompañarlo-

Dijo la joven tomando gustosa la mano de su presente guía de baile, hasta parecía que ambos iban conjuntados en vestimenta, Bethesa estaba escandalizada al ver a aquella dama ignorar de aquella manera a su hijo, mientras aquel apuesto joven de peinado estrafalario la guiaba al centro de la pista, la melodía del segundo Vals de Dimitri Shostakovich sonaba, ambos se separaron levemente tocando palma con palma, Alastor con su otra mano en la espalda, y ella en la falda de su vestido, dando un paso al frente y el otro atrás , repitiendo lo mismo con el otro brazo.

Luego dando una media vuelta a la joven, Alastor se queda tras ella y comenzaba a guiarla muy ágilmente, para luego dar dos vueltas más dejándola de frente, guiándose completamente por la melodía.

- ¿Asi que cuenta cuentos?-

La joven lo miró directamente a los ojos, el caballero que la guiaba sonrió suavemente.

-Si te dijere que no soy un plebeyo, que soy un príncipe y que vengo a vengarme de él ¿Qué me dirías?, ¿me delatarías acaso? O ¿si te dijera que deseo secuestrarte? -

La joven le miró con suavidad, no se había dado cuenta que ambos eran el centro de atención en el baile, por sus pasos, por la manera que bailaban con tanta soltura, algo que hizo hervir en celos a los hermanos Von eldrich.

- ¿Secuestrarme?, supongo que pensarías eso sería un golpe duro, pero no te delataría, preferiría me tomes a mí en vez de que tomes una venganza ante mi padre, intercambiaría su vida por la mía y su sufrimiento por el mío-

El joven la inclinó levemente, la joven sintió el aire congelarse en su garganta y una sensación grata instalarse en su vientre.

-No mereces dolor princesa, a diferencia del miserable de tu padre he hallado gracia en ti, eres bella, dulce y sublime, princesa espero entienda que pienso tomar mi venganza, lo que ha hecho su padre a mi reino es algo que no se puede perdonar, espero se despida de su noviecito prontamente querida que tomaré tu palabra y tarde o temprano te llevaré a mi reino, donde serás mi hermosa y bella reina, la joven no notó en qué momento pero el joven llevó sus labios sobre los propios haciéndola sentir algo que jamás había sentido con Seviathan, el mencionado se alarmó alejando a su prometida de aquel miserable plebeyo.

- ¿Cómo osas profanar a mi prometida con sus sucios y asquerosos labios? -

El mismo sonrió con cinismo sin ningún tipo de temor aparente, la joven llevó su mano a los labios aun con la sensación de los varoniles sobre los suyos.

-Solo hice lo que más de uno desea hacer, pero no dice, míralo por el lado bueno ella tendrá por fin con quien comparar-

Dijo para ver como la joven princesa se interponía entre ambos.

-Querido por favor, no hagas un espectáculo te lo ruego, papá está muy entretenido con lo que está sucediendo y no quiero darle un mal cumpleaños-

El joven hizo an un lado a Charlotte quien casi se cae si no es retenida por el brazo de Alastor.

-Debo retirarme, pero debo pedirle por favor no maltrate a mi futura esposa-

Dijo guiñándole el ojo a Charlotte quien se sonrojo aún más, Seviathan por su parte estaba a punto de golpearle.

-Jamás se casaría con un miserable plebeyo-

El joven simplemente calló no era quien para arruinar la sorpresa que tenía preparada.

-Buena fiesta mi querida princesa-

Alastor por fin se marchó, indicándole a Moxxie que podía quedarse allí, pronto vio como la princesa decidió salir tras el joven, Seviathan iba a ir tras ella, pero solo se quedó allí

-Alessandro-

El joven sonrió con suavidad para luego encarar a la princesa Morningstar.

-Querida mi verdadero nombre es Alastor-

La joven se sorprendió pensó que era hipotética aquel planteamiento del joven.

- ¿Enserio planeas secuestrarme? -

Dijo mirando al suelo, el joven sonrió con picardía.

-Claro, es un hecho-

La joven se acercó con lentitud hasta Alastor.

-Dame tres meses para cambiar tu deseo de venganza si no merma me iré sin necesidad de que me secuestres-

El joven sonrió y beso el dorso de la mano de aquella hermosa princesa.

-Hecho, tienes 3 meses para hacerme cambiar de parecer querida y hermosa dama-

 Dijo para luego marcharse.