El joven rey de Woodstock se encontraba preparando todo para la gran contienda donde esperaba por fin traer de regreso a su princesa, mientras en el corazón de la condesa la duda y el temor comenzaba a tomar fuerza, pronto la misma decidió acercarse a Alastor, quien ahora se encontraba planeando todo con sus leales caballeros.
-su alteza, su majestad, le ruego por favor detenga esta locura, siento que algo malo va a suceder si va hacia el reino que ahora se llama Von eldricth. -
Dijo la joven mirando a su amado rey, el mismo simplemente hizo un mohín de enfado, no quería nada que lo separara de Charlotte y mucho menos que entorpecieran su camino hacia ella.
-lo siento condesa eso queda fuera de discusión, no sé qué tantas cosas podrá hacerle ese ser a mi esposa, es ahora parte del reino, así como parte de mí, no puedo simplemente olvidarla y dejarla allí, es una estupidez imposible la que me dices-
La joven sabía que pronto la guerra por esa miserable de nombre Charlotte se iba a realizar y temía que el único muerto allí fuera su amado y adorado príncipe.
Mientras en el reino antes mencionado el joven rey se encontraba alistándose para la posible contienda además de seguir torturando a la hermosa reina Charlotte.
-ya casi caerá en mis garras el rey de Woodstock, vez lo que eres capaz de crear querida, un hombre desesperado por recuperar a su amada no esperaría ser eliminado por las manos de estas, es una muerte poética podría decir y la mejor muerte que pueda esperar querida-
La joven simplemente lo alejo de ella de un ligero empujón cada día que pasaba se le hacía mucho más repugnante estar cerca de ese asqueroso sapo que fingía ser un príncipe y jugaba a ser rey.
-NO PODRÍA, NO LO HARÉ SEVIATHAN, NO MATARÉ AL HOMBRE AL QUE AMO-
Seviathan le iba a golpear, pero la joven no se lo permitió, pero no dejo de sonreír con altanería.
-no querida, tu no lo harás por voluntad propia, pero debo recordarte que siempre estás bajo mi control asi que solo tendré que ordenarte que lo hagas y lo harás, pero descuida en el momento que me asegure que ha muerto te dejaré apreciar su cadáver y cuando veas tus blancas y finas manos teñidas de su sangre te darás cuenta de que solo yo puedo ser tu dueño-
La joven sintió nauseas de solo imaginarse la escena de ella asesinando a su amado rey del Woodstock, la misma se aguantó aquellas imperiosas ganas de devolver el poco desayuno que habría logrado ingerir y le encaró.
-estas enfermo si crees que te veré en algún momento como pareja o algo cercano, eres un cobarde, solo eso puedo decir utilizarme en contra de mi voluntad para acabar con su vida, es algo vil y muy bajo-
El joven sonrió mientras acariciaba el rostro de la joven.
-no necesito tu aprobación para tenerte cuando yo lo requiera y estarás a mi entera disposición aun si no te gusta, no están divertido, pero sirve. -
La joven en ese momento estaba más que enfadada por lo dicho por aquel insufrible ser.
Pronto el día esperado llegó finalmente el ejercito de Alastor entro sin ninguna dificultad al reino, el joven Alastor se aventuró solo hasta el palacio, estaba completamente seguro de que era algún tipo de emboscada o alguna trampa, las campanas de la iglesia cercana comenzaron a sonar, se escuchó el gran tumulto fuera del castillo, las puertas del mismo se cerraron y unos aplausos resonaron al fondo.
-miren, miren que porquería vino hacia mi castillo cayendo a mi trampa cual mosca en el agua-
Alastor miró hacia las escaleras principales mientras Von Eldrich se dirigía hacia Alastor.
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EL REY DE LAS MENTIRAS
FanfictionAlastor es un príncipe con una misión de venganza, el mismo dará con el punto débil de su enemigo, lograra concretar la venganza contra Luzbel