EL REY DE LAS MENTIRAS

RIVALES

La condesa se encontraba en la casa de una amiga tomando el té, la dama era robusta, un tanto más bajita, pero bastan bella, unas curvas generosas un hermoso espécimen femenino, la misma sorbía un poco de su té mientras se cruzaba de piernas.

-entonces Claire ¿Qué te tiene tan mal?, el príncipe ha vuelto-

La joven de tez morena hizo un mohín, para luego tomar la taza de té en sus manos.

-ha vuelto, pero ha vuelto con alguien-

En ese momento la joven se sorprendió al escuchar lo dicho por la condesa.

-refresca mi mente ¿Quién podría ser? -

La dama suspiró con hastío mientras observaba de reojo el castillo a lo lejos.

-la hija de su enemigo, la princesa Charlotte-

La dama rellenita de cabellos no se inmuto al enterarse de aquello.

-supongo que la trajo como prisionera. -

La condesa negó con la cabeza.

-El mismo me confirmó que sería su futura esposa-

La dama frente a ella se encogió de hombros.

-era de suponerse es un golpe bajo para su enemigo. -

Dijo tranquilamente mientras la condesa fruncía levemente el entrecejo.

-antes de que se fuera le pedí que cuando volviese de su viaje se casara conmigo y que me lo prometiera-

La joven sonrió de manera burlona.

-¿te respondió? Porque si no fue asi era de esperarse, el príncipe no ha demostrado interés en ninguna dama de este reino. -

Ambas damas observaban como algunos aldeanos sonreían y saludaban cortésmente a la joven princesa, todos había quedado maravillados con la belleza de la joven, además de aquella aura tan agradable y cálida que transmitía, la dama de tez morena salió al encuentro de aquella hermosa princesa seguida de la dama de cabellos rubios, la recién mencionada quedó asombrada de la hermosura de aquella joven, una belleza no vista en un reino como el de ellos.

-buenos días querida dama, ¿Qué hace en el pueblo?, no le han enseñado que las demás de alta cuna no se inmiscuyen en asuntos de la plebe-

La joven le miró con seriedad.

-el príncipe me ha permitido conocer su reino, además de decir que sería una muy buena forma que el pueblo ser relacionará con la que será su futura reina. –

La dama no quería mencionar algo como eso pero la condesa reflejaba querer intimidarla con su lenguaje corporal además del indicio del tono grosero de su voz.

-yo que usted no me confiaría joven Charlotte, el príncipe Alastor cambia de pensamiento como cambian las hojas en el otoño-

La joven observo la manera en que la condesa se pavoneaba frente a ella.

-solo mire a mí, un día prometió casarse conmigo y en vez de ello la trajo a usted a este reino-

La joven se sentía furiosa realmente no le importaba lo que el príncipe le ocultara, pero prometer algo y luego no cumplirlo le enfadaba, pronto Millie se acercó a la princesa.

-disculpe le interrumpa condesa, pero nada está escrito en piedra y que le pasará a usted no quiere decir que sucederá también con nuestra amada princesa. –

La condesa levantó la mano para disponerse a corregir a tan malcriada acompañante pero una mano la detuvo.

-no le voy a permitir que le haga daño a esta dama Condesa Claire. -

La Vox de Moxxie hizo reaccionar a la joven de nombre Millie.

-es más debería pedir que la lleven presa por difamar al príncipe Alastor, que yo recuerde él nunca le prometió tal cosa, es más recuerdo que usted fue la que lo exigió, pero el príncipe nunca le hizo la promesa de casarse ya que el mismo me lo dijo "no sé qué tanto pueda cambiar en ese viaje por lo que no quiero que se interponga una promesa con alguien a quien no amo"-

La joven condesa estuvo a punto de llorar, pero se contuvo jamás permitiría que la dejaran como la desesperada.

-pero alguien debería enseñarle modales, como se atreve a hablarle de esa manera a una condesa, además que tal si viene el propio príncipe a aclarar las cosas o es que acaso teme que mis palabras lo desmientan. -

Pronto otra voz se hizo presente.

-señorita sabe usted tan bien como yo que el príncipe ya se ha ausentado mucho tiempo del reino por lo que posee muchos deberes pendientes para mantener en orden nuestro reino, además que el Márquez Moxxie se lo ha dicho, ¿Qué vale más? Su palabra o la del mismo joven que ha sido también como la mano derecha del señor Alastor-

Con esto la condesa se acercó al oído de la princesa.

-ya veremos ¿Quién se queda con el príncipe y el trono?, me asegurare que dicha ceremonia nunca se lleve a cabo-

Luego de ello ingresó nuevamente a la residencia junto con la dama robusta, mientras la joven observa baba aquel hombre que habló.

-usted es el bruto que me trajo hasta aquí-

Dijo la dama recordando la manera tan tosca en la que se le traslado como si fuera ganado.

-disculpe mi maltrato querida princesa, pero usted no dejaba de patalear y retorcerse cual gusano, mi nombre es Husk, en su pueblo me conocían como el cantinero Homero. -

Dijo inclinándose de manera cortés hacia el joven.

-un gusto conocerlo Husk, aunque no es del todo su culpa si no del salvaje que le dio la orden. -

Dijo cruzándose de brazos algo molesta.

-ese "salvaje", bien debería prescindir de usted como reina, pero ahí está bien embobado por usted y si usted anda por ahí libre bien fue porque no le tiene como rehén asi que si no desea ser tomada como reina debería esclarecérselo, como usted acaba de observar aquí y en muchos otros reinos que el príncipe ha visitado hay muchas damas que desean ese puesto que él contada gentileza le ha estado ofreciendo, sin más con permiso. -

Dijo marchándose del lugar algo molesto, no le agradaba que fuera tan agresiva con el príncipe.

En la casa de habitación las damas se miraban con seriedad.

- ¿ahora la ves?, eso es lo que deseo evitar, que ella se quede con este reino, siempre temía cada que salía el príncipe se fijara en otra dama, me alegraba cuando veía que solo era un desliz más, pero con ella, el mismo me lo ha esclarecido y temo no sea tan indicada como yo para ese gran puesto-

La dama de cabellos rubios y cortos sonrió con maldad.

-te ayudaré por un precio, permitirás que me tome al día siguiente como dama de compañía. -

La joven morena estrecho la mano de la más bajita y sonrió.

-dalo por hecho Mimzy-

La misma sacó una poción de su estante.

-vierte algunas gotas en la bebida del príncipe, poco a poco se sentirá enamorado de ti y olvidará por completo a la princesa y si eso no funciona me presentaré ante el mismísimo rey de Morningstar a dar la ubicación de este reino, pero de que esta unión no se realiza, no se va a realizar.

Dijo la dama de nombre Mimzy.

-espero funcione con esto, serás condenada a traición si eso llega a saberse-

La joven sonrió para decir.

-si es una amenaza debo decirte que te arrastraré conmigo delatando este sucio pacto condesa. -

La misma le miró con resignación no podría deshacerse de la joven tan fácilmente pero luego ya vería como quitársela de encima en cualquier momento.