CULPABLES

54 10 2
                                    


Los reyes del reino Morningstar llegaban ante la mirada expectante de los residentes del reino de Woodstock, la que llegó empujando a todos incluyendo a Rosie fue Claire quien se asombró de ver a su "amado" en aquel estado, los guardias llamaron rápidamente a los médicos, prontamente el joven se encontraba descansando en la cama real, mientras Claire lo observaba dormir.

-eso te pasa por ir tras esa perra, debiste quedarte conmigo, mira nada más ¿Qué te han hecho amor mío? -

Luego de besar los labios de Alastor la joven le dejó descansar al salir observó a los padres de su rival.

-debería enviarlos al calabozo por ustedes es que él está de esta manera, si el no despierta les prometo que los mandare a la horca a primera hora-

Antes de que alguien lo tomara enserio Rosie llegó al lugar.

-joven condesa por favor no se atribuya méritos que no le correspondan, ellos han demostrado no ser los causantes de tan aparatoso estado del príncipe, simplemente ha caído en una emboscada, deberías estar agradecida con ellos, de no ser asi el joven habría muerto en aquel castillo. -

La joven Claire se encontraba bastante molesta por la intrusión, por lo que no tardó en replicar.

-jamás les voy a agradecer Rosie, por su preciada hija la cual es una perra es que Alastor ha vuelto asi, si esa mujerzuela no se hubiera metido en la cabeza del príncipe ellos dos estarían muertos ahora y yo sería su esposa-

En ese momento todos se quedaron pensativos, pero gracias al cielo Husk se encontraba en el lugar.

-eso no es del todo correcto Claire, tu no encajas para nada en el perfil de mujer que Alastor buscaría, asi que si no hubiere sido ella habría sido cualquier otra mujer de cualquier otro reino, como decirlo, Alastor las prefiere rubias, yo he sido fiel testigo de ello, además de una mujer amable, dulce de noble carácter y bueno aquí los presentes han notado que lo único noble que tienes el egocentrismo-

La joven simplemente se quedó en silencio para luego marcharse a sus aposentos, mientras Stolas hacía acto de presencia.

-no deben preocuparse el señor Alastor se repondrá solo que durará algunos días durmiendo, la princesa es quien me preocupa, ella no sabe que no estamos más en su calabozo. -

Mientras tanto en el castillo del reino Von eldricth, la joven no paraba de llorar al sentir que habría traicionado el amor de Alastor al herirlo, pensando en la última imagen que su cerebro proceso, sin sospechar que el joven habría sobrevivido gracias a una pequeña intervención.

-ya basta, está muerto y aun asi me molesta, lo mataste Charlotte, no hay nada que hacer-

Decía el inexperto rey del renombrado reino Von eldricth.

-tu, tú me hiciste hacerlo, yo jamás habría sido capaz de herirlo, lo amo y eso no va a cambiar en absoluto, es lógico que tú no lo entiendas, tu no amas a nadie más que a ti mismo, eres egoísta y egocéntrico crees que todo el universo debe girar en torno a ti-

El joven se sentía más que todo ofuscado, no encontraba una manera en la que podía hacer que la joven dejara de llorar aún bajo su control lloraba sin cesar.

-oh no querida te equivocas, amo mi reflejo, amo el poder, además no sé de qué lamentas él se lo buscó, todo habría sido distinto seguirías bajo el hechizo de la poción creyendo que me amabas, y tus padres habrían muerto en algún trágico accidente, pero tenía que llegar él con su cuerpo desnudo y lograr que la poción perdiera su efecto, en poco tiempo logró llevarse abajo el plan que había forjado por tantos años-

EL REY DE LAS MENTIRASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora