EL REY DE LAS MENTIRAS

OBSERVAR DESDE LEJOS

Stolas conocía el famoso plan de los Von eldrich por lo que pidió su ayuda a Alastor para liberar asu hija de la prisión del cabo, claramente también lo tomarían como parte del entrenamiento, los guardas en el lugar se encontraban custodiando a la hermosa joven a todas horas ya que sabían que si no lo hacían perderían la cabeza.

-bien su majestad, intente de hipnotizar a estos tipos yo convertiré a los otros dos en piedra. -

Dijo Stolas ambos se fueron de manera sigilosa e hicieron lo que dijeron, pronto gracias al poder de Alastor uno de los guardas abrió la prisión de vía quien se había alegrado de ver a su padre, pronto volvieron los 3 al pueblo de Woodstock donde se esconderían hasta nuevo aviso, lo que los guardas habían dicho fue que la joven habría escapado por sus propios medios y como sabrán ambos murieron por orden del rey Seviathan

Un mes y 5 días habían pasado desde el parto, el pequeño Alessandro era una belleza de bebé y se encontraba con buena salud, el día que abrió sus ojos su madre quedó maravillada por el hermoso color que estos tenían cerca de la pupila predominaba el color café rojizo de los ojos de su padre y el resto del iris tenía el color de los ojos de su madre, el niño fue una sensación dentro de las paredes del castillos a nadie se le permitía hablar del hijo bastardo de la reina pero lo que se sabía era que ella lo amaba y que era un bebé muy pero muy hermoso, la mayoría de las nodrizas y cuidadoras quedaban enamoradas con una sola sonrisa.

-eres un don juan y encantador como tu padre-

Decía ella mientras observaba como su hijo le sonreía.

-es hermoso ese niño reina mía-

decía Loona mientras la reina tomaba al bebé de aquella pomposa cuna.

-igual a su padre, ha sido un rayo de luz en esta pesadilla mi amado hijo. -

La joven cambio el semblante un segundo al recordar que su esposo no esperaría ni un día más, pero por la vida de su hijo estaba dispuesta a sacrificarse, la joven acompañante de la reina notó la recaída preocupándose por ella.

- ¿sucede algo reina mía? -

La rubia negó moviendo la cabeza de derecha a izquierda.

-no es nada de qué preocuparse Loona-

Dijo la joven al escuchar la risa de su pequeño lo llevó en brazos para caminar por los pasillos del palacio amaba a ese bebé, pronto la joven se topó con Helsa quien estaba sumamente celosa.

-vaya, no sabía que tenías permitido mostrar la cara de ese bastardo en los pasillos del palacio, ¿Qué tal si alguien los ve, sería un gran escándalo-

Charlotte por su parte no iba a caer en las garras de esa mujer, no iba a decir absolutamente nada.

-tiene nombre, se llama Alessandro y es mi hijo les guste a ti y a tu hermano o no, es el niño más hermoso de todo este reino, debería probar tener uno tal vez se te vaya ese mal genio tuyo. -

La joven no podía hacerle nada a pesar de lo furiosa que se encontraba y tal cual como todas sonrió cuando este bebé le dio una risita.

-bueno te dejo a solas con tu hijo-

Ese niño tenía un don de hacer a cualquier mujer sonreír.

-eres un bebé muy encantador-

Pasó el día y la tarde con su amado hijo esta noche el rey separaría a la reina de su hijo ya que quería que esta cumpliera con su parte, la misma se negaba a dejar que se llevaran a su bebé.

-calma mujer solo será en las noches, mientras tú y yo procreamos a nuestro hijo y si en algún momento te niegas tu bastardito sufrirá las consecuencias, asi que entra y cierra la puerta.