Capitulo 44: Conexión

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El clima era tenso, tétrico, tenebroso. Podría pasar cualquier cosa a partir de este momento.

Saiki lo miro los ojos amenazantes de James, y mostro un gesto de molestia ante su sonrisa cínica.

James continuo preguntando.

— Vamos, no seas grosero. Dime tu nombre.

— Kusuo Saiki.

Respondió telepaticamente.

— Con que eres un psíquico, claro, no solo puedes teletransportarte. Lees mentes y quizás tienes otras habilidades. Dime más, ¿Qué sabes hacer?

— ¿Por que me hablas de ti primero? ¿Cuáles son tus intensiones?

James movía su cuerpo estirando sus extremidades, había estado enterrado mucho tiempo.

— Bueno, podría hacer eso.

James se sentó en el suelo como si tuviese todo el tiempo del mundo para hablar. Saiki continuaba preocupado por el estado de Kiyomi y como se habían acelerado sus latidos.

— Soy alguien como tú, nací con algunas ventajas genéticas pero estas no eran ventajas cuando yo era un niño. La existencia de un psíquico seria una gran causa de pánico y asombro para las personas. Nadie sabría si están seguros con su existencia o si son un gran peligro para la humanidad. Así que mis padres sintieron mucho temor por mis habilidades y me obligaron a esconderlas.

— Si quieres que sienta pena por ti, no lo estás logrando.

Saiki quería acabar con el pronto, pero necesitaba tiempo para que Kusuke se pueda recomponer. Dejo que James hablara.

— No, detesto que sientan pena por mi. Soy alguien más bien digno de admirar. Crecí y fui un niño genio, me hice divulgador científico y fui muy exitoso. Y un día conocí a él hombre que me brindo un nuevo significado a mi vida, Blaz.

El aroma de James cambiaba con cada frase, no dejaba de ser repugnante, pero también se volvio más suave cuando recordaba a Blaz.

— Por años la existencia de seres sobrenaturales era digna de cuentos de fantasía, mitos incomprobables y cuentos de boca en boca. Pero hubo una persona que nunca dudo de su existencia. Él me enseñó un mundo donde podíamos poseer todo. Pero aunque él estudiaba a los psíquicos y extraía sus poderes, no los usaba en él. En el fondo, Blaz los detestaba. Así que simplemente fingí que no era como ellos. Trabaje codo a codo en nuestra investigación.

— Secuestraron niños y los sometieron a exámenes rigurosos. Muchos de ellos murieron.

— Así es.

James dio una sonrisa que lleno de enojo a Saiki. Las pareceres se agrietaron tan pronto su puño se cerró con furia. El cielo se volvia lentamente gris y sombrío.

— Fue un efecto secundario. Al inicio todo era prueba y error. El Gen PSK lleva muchos años entre nosotros pero no habia evolucionado tanto sin nuestra investigación. Fue imprescindible utilizar a aquellas personas. Por el bien de la ciencia.

James estaba tan tranquilo, parecía disfrutar de la reacción de Saiki a sus palabras.

— Recuerdo a Fleur llegar a la isla, era hija de dos psíquicos muy débiles, pero teníamos la esperanza de que el Gen sea trasmitido a sus nietos ya que ella no lo poseía. Aun así fue de ayuda, los bebes que nacían en el laboratorio necesitaban cuidados básicos que nadie deseaba realizar.

— ¿Kiyomi nació allí?

— Oh si, ella fue el resultado de todo nuestro trabajo. Blaz siempre quiso una heredera, no se porque, tal vez no era tan feliz con mi compañía. Pero un dia se caso con una mujer que vivía en la isla, esa mujer era Vanesa. Tuvo su preciosa heredera y la llamó Aurora. Era muy especial, era todo lo que él amaba. Pero Vanesa creyó que aquel bebé solo le esperaba una vida de sufrimiento. Ella tenía mayor libertad que cualquiera, se lo había ganado por ser tan obediente, pero un día mordio la mano que le daba de comer, arrojo al bebé al mar en medio de una tormenta.

Florecer: La desastrosa vida de Saiki Kusuo [Editandose] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora