Parte 3

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Me levanté horrible, no paraba de estornudar y tenía el cuerpo en la mierda. Y eso que el fin de semana lo pasé genial.

Creo que Mason tenía razón y al final me he resfriado. Me levanté como pude y fui al salón envuelta en una manta, mi padre miraba el móvil y cuando me miró, su cara lo dijo todo.

-Te ves horrible. -Dijo él con cara de horror. Se acercó a mí y me tocó la frente. -Creo que tienes fiebre princesa.

Fue a por el termómetro y se sentó en el sofá a mi lado, me lo puso y esperó hasta que pitó, lo miró y puso cara de circunstancia.

-Tienes fiebre cariño. -Me cogió en brazos como una princesa y me subió a la habitación. -Túmbate, te voy a traer un paracetamol para que descanses.

Me tumbé y él me trajo el paracetamol, se sentó en la silla de mi cuarto y cogió el teléfono.

-Hola, Dowling, sí, hoy no voy a ir, tengo a Beca mala y no puedo dejarla sola, tiene fiebre. Venga gracias tío, adiós. -Colgó y me miró. -Duermete, cuando te despiertes mete un grito. -Me dio un beso en la cabeza y bajó.

A mí me costó apenas un par de segundos dormirme.

Me desperté y me encontraba algo mejor, bajé y mi padre estaba haciendo la comida.

-Te dije que gritaras. -Dijo él.

-Me encuentro mejor. -Me senté en la mesa y él trajo una pizza. -Pizza.

-Tu comida favorita. Como la de tu madre. -Reí y le di un bocado a la pizza.

-Tu madre llega sobre las 6 y media, pero para no preocuparla no le he contado que estás mala.

-Te matará. -Dije riendo.

-Puede ser. -Dijo él. -Pero al final me lo agradecerá.

-Claro papá.

(***)

Mason

Era bastante raro que Beca no me hubiera avisado de que no vendría, así que en cuanto salí de clase me fui a su casa.

Aparqué y llamé a la puerta, su padre me abrió y yo di un par de pasos hacia atrás.

No es que Mika Hastings no me tratase bien, es que imponía con tanto tatuaje y la cara de mala ostia que llevaba, simplemente imponía.

-Hola Mason. ¿Qué te trae por aquí? -Me dejó pasar y yo entré a su casa.

-¿Y Beca? -Pregunté. -No ha venido a clase ni al entrenamiento y me ha extrañado.

-Está mala, creo que ha cogido un catarro. -Dijo Mika.

-¿Puedo verla? -Pregunté con algo de miedo.

-Claro, sube. -Dijo él y yo subí corriendo a su cuarto. Abrí la puerta y la encontré dormida, no quise despertarla así que solté la maleta y me puse a su lado.

Ella se despertó casi al instante, le toqué el brazo con cuidado y estaba ardiendo.

-¿Qué haces aquí? -Dijo ella frotándose los ojos.

-He venido a ver cómo estabas.

-No muy bien. -Dijo ella, estornudando. -Me resfrié el viernes.

-Te lo dije. -Se acurrucó a mi lado y yo le aparté el pelo de la cara. -Ponte el termómetro.

Se lo puso y pitó en unos minutos, lo miré y vi que tenía fiebre.

-¿Qué pasa? -Preguntó ella con voz débil.

-Estás mala. -Dije y ella rió.

-Algo que no sepa idiota.

-¿Cuanto hace que no te tomas nada?

-Desde las 3. -Dijo ella tosiendo.

-Son las 7, iré a por un ibuprofeno. -La dejé en la cama tumbada y me fui a por un ibuprofeno.

-¿Cómo está? -Preguntó Mika preocupado, en ese mismo instante la puerta de casa se abrió, dejando ver a Sara, que parecía cansada.

-Vaya puta mierda de día amor, resulta que... -Levantó la mirada y yo le saludé. -Anda, hola Mason, ¿Qué haces aquí Mika?

-Beca está con fiebre. -Dijo él blanco como la pared.

Sara frunció el ceño y yo decidí ir a por el ibuprofeno.

-¿Desde cuando Mika? -Dijo ella seria, Mika se rascó la nuca.

-Desde las 7 de la mañana.

-Y no se te ocurre avisarme. -Dijo ella. Yo para no meterme subí con el ibuprofeno mientras escuchaba la bronca de Sara a Mika.

-Aquí lo tienes Becky Beck. -Dije dándole la pastilla y un vaso de agua.

-¿Empezamos con química? -Dijo ella y yo reí.

-Creo que no estás en condiciones de darme clases, me quedaré aquí para asegurarme de que estás bien.

-No hace falta, tendrás que estudiar. -Señalé la maleta.

La madre de Rebeca entró y le preguntó a ella que cómo estaba, estuvieron manteniendo una conversación y luego ella se fue para dejarla descansar.

Se terminó durmiendo y yo aproveché para hacer tarea y estudiar, cuando eran las 10 decidí que era hora de irme.

La tapé y recogí todo, me puse los zapatos y bajé las escaleras, me despedí de Neizan y de Sara y Mika y conduje a casa, esperaba de verdad que Beca se mejorase.

Aquel primer día (Cs2) RESUBIENDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora