- 5 - NICK

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Vi mi vida pasar

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Vi mi vida pasar. Veía como la barandilla se alejaba.. mientras yo... caía al.... agua, un poco más cerca de lo que esperaba. Cuando conseguí salir a la superficie, me di cuenta que no era el mar, sino la piscina de la cubierta inferior. Justo donde celebraban la fiesta de la espuma, Alex ya estaba allí. Incluso saltando de una cubierta a otra, llegaba tarde. Pero eso no me preocupaba, lo que más miedo me daba era la bronca de Thiago. Eso sí, la tarjeta la tenía, un poco mojada, pero la tenía.

—¿Nick? — Me preguntó Alex

— ¿Alex? — Le pregunté intentando restar importancia a lo ocurrido.

— ¿Estás loco?

— ¿Lo dudabas?

Me pareció oír un ¿Estas bien? una voz dulce y bastante preocupada. Pero solo veo un montón de turistas impactados. Espero que mi Jefe entienda lo que me sacrifico por animar a la gente... Espero venderlo bien.

....

Entramos en las oficinas del barco, nada envidiable a un gran bloque de oficinas de Nueva York. Alex y yo avanzamos rápidamente al mostrador de recepción. Llegábamos tarde, como todas las noches, siempre nos distraemos hablando por los pasillos con los pasajeros .

— Buenas noches. — Dijo la chica de recepción, casi sin mirarnos — ¿En que puedo ayudaros?

—Vamos a la oficina de animación, la 2056  — Afirme como todos los días, ya debería saberlo.

— Ah, sí claro, pasad.

—Muchas gracias Caren. - Susurro Alex, ruborizándola un poco.

Alex ha intentado tener algo con ella varias veces, me parece incluso que fueron pareja una semana. Creo que algo hizo ya que no puede ni mirarnos.  Lo que no se por que me incluye a mi, no tuve nada que ver, o igual si. Pensé en ir esa noche a la discoteca de la última planta, la más alta del barco, a ver si me cuenta algo. Bueno, no está permitido, teníamos que ir de incógnito.

Cogimos uno de los ascensores panorámicos dentro de las mismas oficinas. Me extraña ver que dos de los siete ascensores, están bloqueados, pero bueno aun nos quedaban 5. Recuerdo que tengo otra misión, averiguar el paradero de esos ojazos azules.

— ¿Crees que podré averiguar el número de habitación? — Le enseñe la tarjeta.

—¿Cómo va a funcionar eso? — Me espeta Alex mientras salimos del ascensor.

— Tendría que ser a prueba de agua.

— De un poco, no de sumergirla en la piscina.

— Al menos pone el código 2547851.

— Ese código no significa nada.

— Pienso conseguirlo tío.

— Mucha suerte. - me da una palmadita en el hombro.

Nos dimos una ultima mirada antes de abrir la puerta del despacho de Thiago, tomamos una gran bocanada de aire y empujamos la puerta, ahí está, frente a nosotros, con su cara mas amigable... 

Ojala.

— ¡¿Me podéis explicar qué ha pasado esta mañana?!


A actuar un poco.

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