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La casa parecía estar en un silencio completo y pacifico. Simon estaba mirando televisión y su mamá se había acostado, ninguno tenía ganas de cenar así que simplemente tomaron un té y se fueron cada uno por su lado. Linda estaba agotada como él, pero por alguna razón quería meterse a la pileta así que fue hasta la pequeña pileta que tenían las casas de empleados y se metió en ella con su traje de baño favorito, una sunga roja.

La luna estaba perfectamente redonda con un círculo de humedad que anunciaba futuras lluvias, las estrellas brillaban tan fuerte que asustaban, no era así en la ciudad. La soledad y la paz del agua que apenas se movía cuando él lo hacía eran como una caricia, juraba que podía quedarse dormido en la pileta.

Y lo estaba haciendo, si no fuera porque alguien se sentó a su lado lo más probable es que Simon hubiera amanecido con medio cuerpo en la pileta y el otro quemado por el sol.

- Hey, ¿Te desperté? - Simon ni siquiera atinó a abrir los ojos, sabía quién estaba ahí y no quería enfrentar ese problema.

- Siento que esto ya es acoso. - Dijo con la voz más tranquila de lo que en realidad estaba.

Wille empezó a reír, Simon escuchó que ponía los pies en el agua. El olor a alcohol no tardó en llegar, claramente había estado de fiesta, se aburrió y de alguna forma lo encontró. Simon abrió los ojos, tenía curiosidad de cómo se había vestido para la ocasión.

- Yo siento que me estás empezando a esquivar.

- Bueno, no soy responsable de cómo te sentís.

Blanco. El color de su camisa y su short. Sus medias descansaban dentro de las zapatillas también blancas. Wille noto que estaba siendo extremadamente observado.

- ¿Te gusta lo que ves?

- No me disgusta para nada.

Simon apretó sus labios para no sonreír, sabía que Wille lo estaba mirando podía sentir sus ojos sobre él, sintió la tensión entre ambos y el corazón le comenzaba a acelerar

- Sara me dijo que estarías acá - Wille le interrumpió el hilo de pensamientos.

- ¿Quien? - Dijo Simon con total seriedad.

- ¿Tu hermana?

- Si... ¿Y a qué viene esto? - Simón salió del agua, sentándose junto a Wille, miró hacia atrás, tiró de de la toalla de una de las sillas reposeras que estaban ahi y se acosto poniendola como almohada.

- ¿Te estás tirando a tomar sol en medio de la noche?

- Tomar luna - Le aclaro Simon.

- ¿Por qué estás acá? - pregunto Wille

- Me gusta la calma y la soledad

Simon se arrepintió enseguida de lo que había dicho, estaba siendo un imbécil y Wilhelm no lo merecía. El rostro de Wille parecía como si estuviera dudando de toda su existencia y dolía verlo la verdad, se sentía horrible. Simon suspiro.

- ¿Quieres meterte? - Le pregunto tratando de arreglar sus palabras, la verdad es que Simon odiaba a los ricos y no podía evitar ser amargo junto a ellos, aun no entendía porque Wille se sentía diferente, tal vez porque su lengua había tocado su piel y ahora no podía pensar en otra cosa.

- Claro, me encantaría.. - El rostro de wille se iluminó y el de simón también cuando vio que Wille se empezó a quitar la camisa blanca y luego como si se tratara de algo super normal se quitó los shorts blancos quedando completamente desnudo frente a él.

- Okay... - Simon miró a otro lado ni siquiera llegó a mirarlo simplemente se quedó quieto y aturdido por lo que estaba pasando.

- ¿Te molesta? Es que me gusta sentir el agua.. - Wille empezó a bajar por los escalones hasta que el agua le cubrió hasta la cintura.

Amor de verano (WilmonAU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora