STARBOY ✰

three | it's you

El sonido que hacían al pisar las botas que llevaba Sunghoon estaban volviendo a Heeseung loco, el castaño llevaba más de cinco minutos caminando de un lado a otro en su dormitorio.

—Ya te lo dije Hoonie, no estoy fumando si quieres ven y revisa —aseguró levantando sus manos en defensa.

Sunghoon lo miró dubitativo y suspiró acercándose a él. —No quiero que contraigas algún cáncer de pulmón Hee. —soltó peinando el cabello que se posaba sobre la frente del mayor.

Heeseung trató de reprimir algunas carcajadas y miró divertido al castaño, ganándose una mirada reprobatoria que cambió a una de sorpresa al momento de que este pegara sus labios con los labios del contrario. Se besaron desesperadamente, como que si nunca lo hubiesen hecho, un beso que demostraba lo único que sentía el uno por el otro...

Atracción física.

La habitación de repente se había vuelto bastante caliente, ambos cuerpos se rozaban mientras sus lenguas se movían al compás.

Pero respiraciones aceleradas y jadeos se vieron interrumpidos cuando escucharon el sonido de la puerta siendo tocada. Separaron sus labios y Sunghoon soltó un quejido que hizo reír a Heeseung quien ya se encontraba camino a la puerta.

Un Sunoo agotado con al menos dos maletas se encontraba del otro lado de esta, su mirada distraída había cambiado con rapidez al momento de encontrarse con Heeseung quien ya lo miraba con aquella media sonrisa que supuestamente odiaba.

—Oh... —susurró al ver que había llamado a la habitación de Heeseung y no a la de su nuevo compañero.

—Eres tú.

—¿Eh? Uh, si, supongo... —balbuceó con nerviosismo.

—¿Quién es? —gritó Sunghoon desde atrás.

Sunoo al darse cuenta de que además de haber llamado a la habitación equivocada, había quizás interrumpido en algo a la pareja abrió sus ojos de par en par y tapó su boca con vergüenza al ahora notar lo desordenada que estaba la camisa de Heeseung. —¡Oh mi dios lo siento creo que me equivoqué de habitación adiós! —Sunoo se dió la vuelta luciendo como un robot –un robot completamente avergonzado–.

—Es mi compañero de cuarto. —le respondió Heeseung a Sunghoon.

Sunoo frunció el entrecejo con confusión y volvió a mirar al mayor. —¿Qué?

—No te confundiste de habitación, yo seré tu compañero.

—Debe de ser una broma —murmuró.

—No lo es, entra. —dijo sorprendiendo al menor de haber sido escuchado.

Sunoo entró a la pequeña sala de estar que tenía el
–también– pequeño lugar y observó tres puertas que dedujo eran los dos dormitorios y el baño. Sus ojos viajaron de la habitación cerrada a la que se encontraba abierta dejando ver a un Sunghoon sentado en la cama con la misma expresión de confusión en su cara.

Heeseung empujó con suavidad a Sunoo hasta la puerta cerrada y abrió de esta mostrándole donde dormiría de ahora en adelante. —Entonces Sunoo-ssi este es tu dormitorio, allí está el baño y aquí al lado está el mío.

Sunoo asintió efusivamente con la cabeza queriendo entrar, dejar sus cosas y salir de esa incómoda situación de una vez por todas.

—Tus llaves, si necesitas algo no dudes en buscarme —dijo Heeseung revolviendo el cabello rubio del más bajo y pasándole lo que parecía ser un juego de tres llaves.

—¡Uh bien, gracias! —expresó arrebatando las llaves de su mano y entrando con prisas al dormitorio.

Sunoo sintió su cuerpo relajarse una vez que se encontró dentro del pequeño cuarto, solo contaba con una cama individual, un escritorio y un armario, justamente igual a su antiguo dormitorio, solo una cosa lo hacía diferente, el color verde menta había sido sustituido por un color azul cielo.