Capítulo 21

466 99 128
                                    

[Tiempo de traiciones: que parezca que uno de los dos ha traicionado al otro (pero ¡no!)]

Provoca una sensación extraña ver que todo tu futuro se borra en pocos segundos.

-¿No crees que estás exagerando? -Me increpó Denki unos días después, mientras le daba vueltas al asunto en su coche de camino al instituto.

Le eché una mirada asesina, casi tan potente como las de él.

-¿Exagerando? Si no entro en la Todai, estaré real y extremadamente acabado. Y todo por mi culpa.

-A eso, Izu, yo lo llamo exagerar. ¿Por qué demonios estarías acabado? Podrías entrar en cualquier otra universidad y conseguirías igualmente convertirte en médico.

-¡Porque siempre se ha tratado de la Universidad de Tokyo, Denki!

Denki frenó el coche con dramatismo, hizo chirriar las ruedas hasta que se detuvo por completo tras estacionar a Rayo. Luego se dio la vuelta para mirarme con expresión sería, poco propio de él.

-Izuku. A eso me refiero. ¿Por qué te importa tanto ir a la Todai? Sé que es donde estudió tu padre, pero eso no es... -su voz sé fue apagando, inseguro de cómo expresar lo que quería decir.

-¿Qué? ¿Importante? -exigí saber- ¿No es una razón suficiente?

-Exacto, sin intención de parecer un auténtico cabron ¿Ir a La Universidad de Tokyo va a traerte a tu padre de vuelta?

Me encogí de dolor. Denki tenía razón. La Todai no me lo devolvería.

-No, no lo hará. -Me incliné en el asiento y miré hacia el techo del coche-. Pero, Denki, no se trata de eso. Quiero que mi madre sepa que puedo ser el mejor, como mi padre. La Todai es...

-Algo simbólico -Denki completo mi frase mientras se recostaba en el asiento.

-Sí, sombólico.

-Del buen trabajo que ha hecho tu madre criándote.

Asentí.

-Izu, todo el mundo sabe que tu madre ha hecho un gran trabajo. Ella también.

-Solo quiero que... quiero que ella siempre se sienta orgullosa. Que nunca se preocupe.

-Izu, los padres siempre se preocupan, no importa lo que pase. No podrás protegerla siempre por más perfecto que intentes ser.

-Lo sé. Pero siempre me convenzo de que puedo hacerlo -dije mientras me secaba las lágrimas de los ojos.

-¿Cómo se lo ha tomado? Si algo sé de Inko es que nunca te ha castigado por haberla decepcionado.

-No, claro que no. Se puso triste al principio, pero fue ella quien me intentaba animar diciendo que no era un problema y que aún tenía oportunidades. Luego hicimos una maratón de una serie entera.

-¡Lo ves! Ni se te ocurra preocuparte. Y ahora que lo de mami esta solucionado ¿Cuándo piensas contarle a Katsuki todo esto? -me preguntó cuando volvió a poner en marcha el coche.

Katsuki. Lo había estado evitando los últimos días con la excusa de estar ocupado con los asuntos del consejo estudiantil. No me sentía listo para contarle lo de la entrevista y no quería que me viera triste. Sabía que se sentiría culpable y no quería que se sintiera así por una decisión estúpida que había tomado yo.

-No estoy seguro. Pero pronto.

Denki me miró poco convencido mientras aparcaba en el instituto.

-Pronto, claro que sí -dijo.

A Dorama for IzukuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora