UN MORTIFAGO ENAMORADO II ✔️

C: 197 - NECESITAMOS TIEMPO

NARRA T/N:

(Más noche)

- Sin más, Potter y yo bajamos hasta la sala Común y yo iba escondido con el en la capa de invisibilidad. Al llegar al Gran Comedor, los chicos Gryffindor del ejército de Dumbledore nos cubrieron para no ser vistos por nadie.

No nos dio tiempo de hablar a mi y a los chicos pues apenas llegamos, en ese momento también lo hizo Snape, Harry guardo su capa y todos nos quedamos callados -

Snape: Muchos deben estar preguntándose por qué los hice venir a estas horas. Me fue notificado que Harry Potter y T/n Gellert Grindelwald Dumbledore fueron vistos en Hogsmeade esta misma noche.

-Empezaron a oírse murmullos de todas las casas sobre ambos y del si estábamos aquí -

Snape: Y ahora, si cualquiera... Estudiante o maestro pretendiera ayudar al Señor Potter y al señor Grindelwald, será castigado de una manera consistente con la severidad de su infracción. Y además, cualquiera que esté al tanto de estos eventos y que evite confesarlo ahora, será acreedor a un castigo igual.

-En ese momento hubo un gran silencio y Snape empezó a caminar hacía el frente por el espacio que había.-

Snape: Muy bien, si alguien de aquí sabe algo de los movimientos de Potter y Grindelwald de esta noche. Lo invito a que pase al frente... Ahora.

-Y otra vez ese silencio por parte de todos recorría la tensión en el Gran Comedor. Sabía lo que tenía que hacer pero estaba esperando el momento y después de unos segundos más salió Potter de donde estaba oculto y yo también lo hice.

En ese momento se escucharon voces de sorpresa al ver que estaban aquí y entre nosotros. Yo caminé y me puse a lado de Potter el cual quedaba viendo con odio y seriedad a Snape.-

Harry: Parece que a pesar de sus exhaustivas estrategias de defensa. Aún tiene un pequeño problema de seguridad director.

T/N: Sin más que decir, ¡denle la bienvenida al problema de seguridad... la orden!. - dijo alzando sus brazos y desafiando a Snape con su mirada-

-Y si, en ese momento se abrieron las puertas del Gran Comedor y entró la orden junto a Neville y Dean quienes eran el ejército de Dumbledore, mi ejército. Bueno, ya sabemos por qué. Entre ellos, entró Hermione y Ron-

Harry: Me temo que es bastante grande.

-Ellos se quedaron parados desafiando a Snape desde la entrada mientras yo veía a Harry y él a mi y ambos asentimos, era hora del show.  -

Harry: Que agallas de tomar su lugar. ¡Dígales lo que pasó esa noche!, ¡dígale como lo miró a los ojos!. Al hombre que confío en usted, y lo mató.

-En ese momento sentí un nudo en la garganta porque sabía que Harry y yo no pudimos tener esa conversación jamás y sabía que esas palabras eran para mí. Además de que mi padrino Snape me quedó viendo cuando Harry terminó su discurso y yo no pude evitar agachar la cabeza pero después asentí y lo miré -

Harry: ¡Dígales!.

-No pasó ni un segundo cuando mi padrino tomó su varita en mano y nos apuntó a los 2 y en ese momento Mcgonagall se puso en medio de ambos.

Todos se recorrieron hacía las esquinas y en medio solo quedamos Mcgonagall, Potter y yo.

Tanto Harry como yo ya teníamos varita en mano contra él, al igual que la orden y el ejército y la primera en atacar fue la profesora Mcgonagall quien de su varita salió un poco de fuego pero Snape lo desvió hacía un lado.

Y ahí fue donde sonreí, me di cuenta de que mi plan si estaba funcionando. Mcgonagall siguió atacando a Snape con el mismo hechizo sin pronunciarlo y Snape seguía desviando los hechizos hacía sus lados y caminando hacía atrás.