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Final.

Ya había pasado un año desde que la pareja llegó a Londres, por ningún motivo ellos se olvidaron de su lugar de origen, sólo querían poder amarse sin ninguna restricción.

Durante el tiempo que transcurrió Jungkook regreso al castaño por otro lado Taehyung dejo el rubio, todo gracias al fetiche de Jungkook, suena raro pero Jeon amaba ver a su futuro esposo con el cabello rubio y con mullet, por ahora todo iba de maravilla estuvieron planeando su boda durante muchos meses y estaban a días de poder hacer realidad su sueño. Ligarian su relación a un nivel más serio, Taehyung continuo con su carrera de pintor volviéndose uno de los artistas más reconocidos a talla mundial, gracias a su arte tan liberal, solía pintar acerca del cuerpo humano, todas sus esculturas y pinturas eran hombres, besándose, tocándose o incluso abrazándose, era un artista de obras homosexuales.

Jungkook, por su lado terminó orillando sé a la música, comprendió que la carrera que llevaba no era tanto lo suyo y después de haber escrito y protagonizado una canción para el gran Vante lanzada en Souncloud debutó como músico. La vida de ambos chicos cambio bastante, tenían lo suficiente para ser felices.

Solían pensar que hacía falta algo en su vida ...

Se sentía algo vacía la casa ya que era una mansión altamente lujosa, Jungkook adoraba a los niños y Taehyung igual, ¿No sería increíble un niño?. Eran jóvenes si, pero anhelaban poder tener un bebé en un futuro.

Era Sábado por la noche el aniversario de la pareja y el cumpleaños de Jungkook, durante el día Kim estuvo fingiendo haber olvidado la fecha mostrándose distraído y ocupado en su mundo de bocetos, pinturas y pinceles.

Jeon se preguntaba en qué momento su novio había pasado por alto una fecha tan importante como está, Kim solía ser de las personas más románticas y más en sus aniversarios, recuerda con claridad que los meses pasados incluso le llevaba la comida a la cama, solo por ser una fecha especial.

Paso la secadora con su cepillo con paciencia por sus hebras dándoles un poco de esponjosidad necesitaba ver a su novio, esté no decía nada, nisiquira un beso le había dado, se aparto la bata colocándose una ramera del mayor quedando solo en eso y bóxer, se lavo los dientes, y se echó en la cama, sabía que no debería ser egoísta con su pareja pues sabía que tenía una exposición de artes importante en dos días, debía ser paciente, aunque le hubiera gustado que por ser su cumpleaños el chico de sonrisa cuadrada le felicitara pero no era así.

Kim aparto su bata dejo sus acuarelas y pinceles en una mesa, era un desastre con pintura y hasta polvo de gises, no paso por desapercibido nada referente a las fechas especiales, de hecho el había planeado una fiesta que sería mañana para celebrar ambas cosas, porque así era Taehyung tan reservado y listo.

Camino sigiloso hasta la recámara dónde estaba seguro que su novio estaría reposando, la habitación estaba oscura dejando sólo reflectar la luz tenue del televisor, se acercó a la cama abriendo paso en medio de las piernas del menor, una de sus manos era su apoyo contra el colchón y la mano libre sostuvo la mejilla del chico debajo de él, Jeon desvío la vista sus ojos estaban acuosos al sentir el tacto del mayor tembló un poco dando un respingo en su lugar.

—¿Qué sucede Jungkookie? —masculló en voz baja cerca de los labios del mencionado, Jeon no quería sonar egoísta ni menos afectado por la supuesta falta de atención en su agenda de su novio, así que estaba pensando en que decir.

—¿Sabes que día es hoy?—se maldijo pues su voz salió en un tono más acusador de lo que esperaba, su voz estaba frágil al igual que su corazón.

—Tu cumpleaños y nuestro aniversario amor—soltó despreocupado el rubio acomodándose mejor para no lastimar al castaño, este suspiro regresando su mirada.

𝓓𝓝𝓐  ᵀᵃᵉᵏᵒᵒᵏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora