CAPÍTULO 19

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     AVISO: Este cap es puro lemon 😏🍋. Todo bien hot porque yo me preocupo por su salud.

     Estaban tan sumergidos en su propia nube de amor que Jimin casi olvida la gran noticia que tenía que anunciarle a su hermoso chico.

     —Bebé, sería mejor si te sentaras para lo que tengo que contarte —sugirió el pelinegro contra sus labios.

     —No es nada malo... ¿Cierto? —respondió Jungkook, afianzando más su agarre a su cintura para no perder contacto.

     —Al contrario. Es algo demasiado bueno —susurró Jimin contra el oído del más alto, y alejándose un poco para verlo directamente a los ojos continuó diciendo—. Resulta que ayer hablé con Seung-hyun porque tenía que renovar mi contrato para seguir trabajando en Dark Room y ya lo hizo pero...—y dejando un silencio intencional para que su chico casi perdiera el aliento, Jimin terminó su frase—. Ya no podrás follarme tan deliciosa y duramente como lo hacías en aquella oscura habitación, porque ahora soy su nuevo recepcionista —dijo el pelinegro con una amplia sonrisa.

     Jungkook tardó unos segundos en procesar esa información, parpadeando varias veces, creyendo que quizás había oído mal. Reconectó sus neuronas al ver que su pareja no vacilaba por lo que al fin decidió hablar.

     —E-espera, entonces... ahora tú... ¿¡Eres sólo mío Jimin!? —exclamó el castaño con los ojos bien abiertos, llenos de emoción.

     — ¡Si cariño, todo tuyo! Y gratis por suerte — se regocijó el más bajo con una seductora sonrisa.

     —Es ese caso, Esto merece una larga y muy placentera celebración —sugirió Jungkook, cambiando su semblante emocionado por uno más seductor—. ¿No te parece, dulzura? —agregó, bajando sus manos hasta las firmes nalgas de su chico, amasándolas a su antojo.

     —Mmm... Me encanta cómo piensas, bebé —concordó Jimin, para luego dar un pequeño brinquito sobre la entrepierna del castaño, la cual comenzó a despertarse ante aquel estímulo.

     Jimin empezó a restregarse con mas ganas sobre los genitales de Jungkook, mientras que llevaba sus rojos labios a su cuello para lamerlo lentamente, apretando más su boca contra su piel al sentir el latido de su pulso que empezaba a incrementarse a cada segundo. Dio largas lamidas a ambos lados del cuello del castaño, el cual ya había comenzado a soltar los primeros jadeos al aire.

     Aun con Jimin sobre su cuerpo, Jungkook caminó tambaleante a causa de su creciente excitación hasta su habitación, y en el camino, comenzó a desabrochar los botones de la camisa del más bajo, arrojándola por algún lugar del cuarto para luego hacer lo mismo con la que él traía puesta.

    Jungkook se agradeció internamente el haber ordenado su escritorio en la mañana ya que este estaba totalmente despejado, por lo que, depositando el cuerpo de Jimin sobre la superficie del mencionado mueble, subió su rostro para comer su boca con hambre, abriendo sus labios para darle paso a su deseosa lengua de ir a recorrer la del contrario sin tregua, mientras sus manos se deshacían primero de sus molestos pantalones que cayeron junto con su ropa interior hasta sus tobillos.

     Por su parte, Jimin hizo lo mismo con el resto de sus prendas, y sacándolas cuidadosamente de su cuerpo las dejó caer al suelo para quedar totalmente desnudo.

     —¿Recuerdas nuestro segundo encuentro, bebé? ¿La forma en que nos comimos deliciosamente el cuerpo del otro? —inquirió Jimin con su sensual voz sobre el oído del castaño.

     —Claro que sí, dulzura. Recuerdo cada uno de nuestros ardientes encuentros —respondió Jungkook, acariciando los firmes muslos del pelinegro, incrustando sus dedos en esa tersa piel.

Dark RoomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora