Capítulo 4: Nueva York.

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Estoy a una hora de aterrizar en Nueva York, al principio sentí tanto miedo, demasiados nervios, mi estómago estaba revuelto, pero al mirar nuestra foto todo se esfumaba y me dejaba una esperanza, una ilusión, no sé qué me pasaba, esto que sentía estaba mal, solo estaría ahí por negocios y nada más. A parte que él sigue con Doña Marcia, y para variar esa tal Karla Santibáñez, que no sabía ni quién era y ya me caía un poco mal. Es normal que alguien pueda caerte mal sin conocerlo, pues sí y más si está cerca de Fernando Mendiola. Pero cuando yo llegué a Nueva York, él no notara ni la más mínima angustia que puedo sentir por lo que sea, estaré ahí los cinco días tratando de cerrar contratos y ya. Nada más que negocios y más negocios.
Aunque a ti mi diario no puedo engañarte, solo tu me entiendes y sabes que es difícil estar tan cerca de Fernando, alejada de todos, y no pensar en la posibilidad de que en una noche todo podemos construir como me lo había dicho hace unos días en el Bonterra.

***

Cerré mi diario y miré por la ventana, se veía el mejor de los paisajes. Esperaba que este viaje fuera bueno para mí, tenía la ilusión de que si se daban más contratos y promoción para Conceptos pueda liberarme de ese embargo y poder tener mi vida tranquila.

***

Caminaba por las calles de Nueva York, los cinco días que había estado ahí habían sido de los peores, y aunque trataba de concentrarse en el trabajo y pensar solo en eso le era imposible, ella estaba en su mente, en su corazón clavada, y no podía sacarla de su ser. En el trabajo todo iba bien hasta tenían la oportunidad de expandir más la feria gastronómica, había conocido a una representante de Specialty Food Summer Fancy Food Show, y pensó que en ese lugar podía conseguir más contratos para liberar a Conceptos de dónde lo metió. Karla Santibáñez su nueva amiga lo había ayudado a que Conceptos pudiera tener un stand en el evento, y eso significaba poder hablar con los inversionistas de otros países. Pero para eso necesitaba de Leticia, él no quería que ella pensara que lo hacía para tenerla cerca y no porque no lo deseara sino porque se complicaría las cosas y lo que menos quería era eso. Él estaba esperando el momento justo para demostrarle como le dijo antes de viajar cuánto la amaba. Pero después de esa llamada que tuvo con ella su vida, y su alma se volvieron a desgarrar.

-Bueno. (Contestó molesto)
-Hermano qué carácter.
-¿Qué quieres Carvajal?
-Solo preguntarte cómo van las cosas por allá.
-Bien, supongo que bien.
-Que bueno hermano, acá también las cosas van bien la "presidentolita" se fue con él "de los de allá" a San Miguel Regla y no han llegado.

Colgó sin más Omar era un imbécil, él no había preguntado nada, porque le decía lo que ya sabía y lo que en todo el día trato de olvidar. Que su Lety se fue con otro a San Miguel Regla. Nueva York una ciudad impresionantemente hermosa, que él no podía disfrutar, no esa noche, ni las que seguirán, había tanta gente a su alrededor y él se sentía solo. Volteó a ver un espectacular y se imaginó a su Lety mandando un beso. Pensó "¡Ay Lety, Lety yo quisiera soñar con usted toda la vida!"

"Maldita sea, maldita sea entre tanta gente y yo me siento tan solo, solo. Pero lo peor Fernando es que es tu culpa, solamente tuya. Aldo apareció y tú enviaste a Lety directito a sus brazos. Todo es culpa tuya." Decía mientras caminaba y golpeaba con sus manos los costados de su cuerpo en señal de coraje. "Y claro, ahora por tu culpa Lety se fue a San Miguel Regla con otro."

El sonido de su teléfono interrumpió sus palabras.

-¿Qué quieres? Maldita seas Carvajal. Ya te dije que me dejaras en paz. (Limpio sus lágrimas esas que no paraban de salir).
-Pensé que vendría por mi al Aeropuerto.
-Lety. (Sus lágrimas se vieron interrumpidas por la curva que se delineó en sus labios, esa sonrisa que llegó casi a sus orejas). Pe-pero co-como dijo A-a-aeropuerto.
-Sí, perdón por no avisarle antes Don Fernando...
-No importa, no importa, ¿Está aquí en Nueva York? (Tal vez era la pregunta más tonta pensó, pero necesitaba saberlo, y saber que no estaba soñando).
-Sí mi vuelo aterrizó hace unos minutos y bueno si me dice en qué hotel está yo...
-No, no, no se mueva de ahí Lety yo ahora la busco. (Colgó e inmediatamente tomó un taxi no entendía nada pero se sentía FELIZ).

La Fea Más Bella: Por siempre mi amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora