Dulce y Amargo ¦ BajiFuyu

O8.-

Después de dos semanas desde la conversación entre Angry y Chifuyu, finalmente llegó el cumpleaños de Senju.

Durante ese tiempo, Mikey y Takemichi seguían enviándose mensajes a diario e incluso se reunieron un par de veces más, teniendo paseos tranquilos y una salida a comer. A Chifuyu seguía sorprendiéndole que Mikey no conociera el departamento que compartían, pero estaba seguro que cualquier día llegaría a su casa del trabajo y lo encontraría allí.

Por su parte, Chifuyu estaba siguiendo el consejo de Angry y continuaba sus conversaciones con Baji, las que podían ser increíblemente largas o solo bastaban con desearse mutuamente un buen día, pero seguían siendo secreto. Se sentía culpable por no hablarlo con Takemichi, pero era de las muchas culpas que sentía, ya que sus sentimientos por el azabache se habían vuelto tan confusos que Chifuyu agradecía no haberlo vuelto a ver desde que salieron a beber juntos.

Pero aquello no duraría eternamente.

Cuando Chifuyu salió de la cafetería luego de terminar su turno, se encontró con Baji bajando de un bonito BMW negro. Sin poder evitarlo, sonrió mientras se acercaba al más alto.

-Es algo tarde para comprar café.

-Existe el descafeinado -contestó Baji sonriendo de lado y Chifuyu rió-. Venía a secuestrarte.

-¿Secuestrarme? -parpadeó Chifuyu y luego hizo una mueca-. ¿No puede ser otro día? Es el cumpleaños de Senju y bueno...

-Lo sé -asintió-. La verdad es que solo quería verte.

La sinceridad en las palabras de Baji hizo que el corazón de Chifuyu comenzará a latir enloquecido, sin embargo, el rubio dio una sonrisa traviesa, queriendo no tomar en serio sus palabras.

-¿Estás tratando de seducirme? Porque quizás tenga una cita en la fiesta.

-¿Estás engañándome? -Baji le siguió el juego con una sonrisa.

-Es probable.

-Qué feo, Matsuno, juegas con mis sentimientos.

-Ahora soy más popular, ya sabes.

-¿El chico nerd ahora es popular? -Baji casi resopló una risa.

-¿Nerd? ¡Tendrás cara para decirme eso tú!

Baji soltó una carcajada, levantando las manos en señal de rendición mientras negaba con la cabeza. Chifuyu sonrió amplio y divertido.

-Sí, sé del cumpleaños de Senju -dijo Baji, ya en serio-. Estoy invitado, pero tenía unas cosas que hacer y recién voy, le avisé a Mikey y él me comentó que aún no llegabas, entonces, pensé en venir por ti.

-Vaya -comentó Chifuyu, sorprendido-. Es muy amable de tu parte.

-Soy una persona amable.

-Sí, ajá.

-Cállate y sube tu humanidad a mi coche.

Chifuyu rió divertido mientras Baji volvía a subir a su coche para después mirarlo con impaciencia, por lo que el rubio se apresuró a subirse por el lado del copiloto.

De lo primero que Chifuyu fue consciente fue del aroma al perfume de Baji impregnado en el vehículo, lo que era normal, pero no por eso se sintió menos abrumado. Lo segundo fue la comodidad del asiento, tenía espacio suficiente para estirar sus piernas y dejó la mochila entre ellas antes de colocarse el cinturón. Y lo tercero, para su ligero disgusto, fue un sutil aroma a perfume femenino, el cual seguramente pertenecía a la prometida del azabache.

Baji conducía con una mano y la otra la tenía en la palanca de cambio, tarareando distraído la música que sonaba de fondo, la cual Chifuyu no tenía idea cuando había empezado a sonar, ya que estaba lo suficientemente ocupado observando de reojo el perfil del mayor y absorbiendo tanto su aroma como el tarareo.