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— Yibo, tus padres ya fueron ubicados en las casas vacías de la manada, la casa de los que trabajan en la casa ya está terminada y ya comenzaron a mudarse, las propuestas con las tres manadas vecinas ya fueron respondidas y quieren reunirse contigo y... Ya me estoy encargando del entrenamiento de los lobos.

Habló Dalai poniendo una serie de sobres sobre el escritorio del alfa. Yibo dejó de escribir en su computador y le prestó atención a su beta.

— Gracias hombre, ve a descansar por hoy, hiciste un buen trabajo — dijo tomando los sobres.

— Mejor me quedo a terminar de ayudarte.

— Mejor ve a pedirle a Lu una cita.

El alfa levantó un poco su mirada y sonrió internamente al ver el sonrojo en el rostro de su amigo.

— ¿Q-qué dices? No hables tonterías.

— Oye, tal vez parece que no soy de los que saben expresar lo que sienten, y si es verdad, pero me doy cuenta de las cosas, te gusta Lu y sabes que es tu predestinada, no pierdas más el tiempo y pídele una cita porque... Dalai, he hablado con Lu y en una semana la voy a enviar a otro lugar-

— ¡¿QUÉ?! ¡¿POR QUE?! ¡ELLA NO TE HIZO NADA Y-

— ¡¿Me dejas terminar?! — levantó la voz mirando a su amigo.

— Lu es híbrida de dos especies, su padre era lobo y su madre hechicera, al no tener una guía de sus dos padres, no tiene un balance entre sus dos lados, por lo tanto ella no se da cuenta que tú eres su mate. Ninguno de sus dos lados ha sido desarrollado de la manera correcta, por eso hablé con un gremio de hechiceros al sur de aquí, ellos estarían dispuestos a entrenarla, guiarla y darle el conocimiento que necesita tanto como hechicera y como lobo, ya que también hay híbridos en ese clan. Discutí esto con ella y está dispuesta a ir, tú la llevarás y también la llevarás a una cita, hoy.

— Ho-hoy no-

La puerta de la oficina fue tocada y el alfa dio el permiso solo para que una hermosa pelinegra se dejara ver.

— Alfa, me dijeron que me mandó a llamar.

— Sí, pasa por favor... ¿ Haz empezado a organizar tu equipaje?  Recuerda que partes en unos cuantos días más —  la castaña asintió con una pequeña sonrisa.

— Bien, te mandé a llamar porque, uno; Dalai será quien te lleve hasta el Clan Rasasvada y dos; mi amigo te llevará a algunos lugares antes debas partir al sur. Eso es todo lo que quería informarte, así que, ya pueden retirarse, ambos.

Lu hizo una reverencia y comenzó a caminar para retirarse de la habitación, Dalai miró a su amigo asustado.

No se si decirte gracias o matarte, pero te amo y te odio — dijo en un susurro antes de salir de la oficina.

Cuando estuvo completamente solo, sonrió y negó con la cabeza.








La noche casi estaba por caer, Zhan caminaba por el bosque mirando todo con atención y con una pequeña sonrisa en su rostro, había decidido relajarse un rato caminando, pues siempre le había gustado dar caminatas solo cuando se sentía desanimado. Por está razón, n estuvo consiente de cuanto tiempo transcurrió, solo sabía que había llegado al lago al que siempre iba.

Se sentó algo alejado de la orilla, pues su miedo al agua aún seguía presente, desde siempre había estado allí. Cerró sus ojos dejando que la suave brisa choque contra su rostro, la cuál no llegaba a ser fría, era perfecto, incluso llegaba a ser algo refrescante y relajante. Pero, su ceño se frunció y rápidamente abrió sus ojos, de repente ya no había brisa, y ya no había luz anaranjada del atardecer. Estaba oscuro, no había cerrado sus ojos tanto tiempo, apenas había sido unos cuantos segundos. ¿Porqué de la nada estaba tan oscuro?

All It's About You ▪︎ ||Omegaverse||   [YiZhan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora