Se veía bastante irritada, su mueca de disgusto lo delataba. Pero, aun con ese ceño fruncido seguía pareciendo una muñeca de porcelana, resaltando su maquillaje natural aquellos labios rojos que tanto destacaba a propósito; Su cuerpo lucía un ceñido vestido rojo, delineando esas sutiles curvas que poseía con una abertura en la parte derecha para mostrar una parte de sus piernas largas y delgadas, modelando unos tacones negros de punta. Su cabello amarrado daba una mejor imagen a toda su apariencia.
Después de todo la apariencia era importante.
—No pongas esa mueca, querida—anuncio el hombre sentado frente a ella—Solo será una simple reunión de negocios—el peli morado tomo una de las botellas que tenía la limosina y comenzó a servirse en una copa—Será senci—callo abruptamente cuando sintió algo presionar su cuello.
—Cállate, sabes la razón por la cual estoy molesta—arremetió con ira contra su "jefe". Podría aplastar con un pisotón su cuello. Alejo la punta de su pie con lentitud—No vale la pena—murmuro en voz alta, volviendo a cruzar sus piernas, demostrando un poco más de piel que lo habitual.
El peli morado trago saliva, sintió como su traje se colocaba húmedo, notando que había tumbado la copa a medio servir de vino. No podía reprocharle nada a la chica, por más que quisiera, siempre tuvo ese carácter y se intensificaba más con la presencia de cierta persona.
Cierta personita que estaría en la reunión.
—Suerte que traje, otro tipo de vestimenta...—volvió a suspirar para sí mismo, viendo como la chica mantenía su mirada perdida en la ventana cerrada de la limosina.
...
Primeramente, la rubia bajo de la limosina una vez que esta se estaciono en frente del lugar, observando con detalle el camino a la entrada, siempre en alerta por cualquier cosa. Cuando verifico que todo estaba correctamente abrió la puerta un poco más para indicarle a su "jefe" que podía salir.
—Gracias, ¿me acompaña mi lady?—el peli morado estiro su mano hasta la chica quien aún molesta la apretó fuertemente causando un pequeño chillido en el hombre—Ay.
—Lo escoltare hasta la entrada mi buen señor—el hombre solo pudo asentir de manera afirmativa, aguantando el dolor que le provocaba el apretón.
Sabía que estaría colérica, pero, si no le informaba de los invitados...cuando se enterara por sorpresa hubiera perdido su cabeza...literalmente. A pesar de que conocía a la rubia desde su adolescencia, casi no conocía mucho de ella, sobre todo su historia completa con él.
Recuerda que volvió a su mansión una tarde fría, estaba lloviendo así que cuando la vio completamente empapada supo que camino sin paraguas, tenía una mirada derrotada. Ahora que lo pensaba, jamás la vio llorar y ese día no fue la excepción.
—Mmm, creo que cambio a como era antes—murmuro el peli morado, notando como la primera sala se veía un poco más minimalista a como solía ser, al menos aun había atención. Gakupo se acercó a la recepcionista soltando la mano de la rubia.
Por en cambio, ella miraba todo con atención, memorizando el lugar de los adornos y posibles salidas (aunque solo había una puerta principal y el ascensor), siempre tenía que estar alerta. Cuando Gakupo termino de hablar con la recepcionista se colocó a su lado, entrando en el ascensor.
Nunca fue de su agrado acompañarlo hasta toda esa multitud, pero era necesario, necesitaba descubrir nueva información y su poder era bastante útil para hacer a cualquiera hablar, por supuesto que el peli morado arriesgaría su vida con tal de obtener lo que necesitaba; Suspiro mirando los números cambiar a medida que subían.
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relatos cortos rinxlen
FanfictionRelatos de mi pareja favorita. Portada hecha por otaku_chan07 te amo mujer :,)