OPUESTOS

CAP. 39

-¿Qué? -pronunció Norman atónito por la rápida respuesta, esperaba que le dijera que sí, pero no era cierto, desde antes tenía muy claro la respuesta que le diría.- Pero, señor Yugo, yo quiero mucho a su hija permítame estar con su hija. -Emma estaba impactada al igual que su padre, ese era ¿Norman Minerva?-

-Feo albino, ¿eres tú? -preguntó mientras cubría a su hija por si ese "extraño" la atacara.-

-No. Yo quiero que me de el permiso de estar con Emma por y para siempre.

-Agh, que parte que ¡no!, no entiendes. -Yugo solo se limitaba a mirarlo y Emma estaba un poco triste y lo notaba en el agarre que le ofreció... A-Ay no, mi hija está triste maldita sea y ahora que hago. Y ese Norman sigue suplicando... Bueno Yugo ay que analizarlo y pensarlo. Él trajo a mi hija, me hizo un gran favor en avisarme cada progreso que tenía para que pronto despertará aunque fuera minúsculo, a estado por estos días sin siquiera a el jardín y nunca la dejó sola. Mierda...- Bueno tú este... ¡Norman! eso.

-¿Sí señor?. -esperanzado-

-Mi respuesta. Esta es la respuesta final. -Ambos Emma y Norman estaban atentos, talvez esta vez daría su aprobación pero bueno hablamos de Yugo.- No.

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Era un hermosa y encantadora mañana, de no ser porque se le había olvidado ir a la estética, para verse más hermosa de lo normal, o eso mencionó su padre.

LLAMADA:

-¡¡Emma!! ¡¡Porque no te despertaste temprano!! -le gritó xx-

-lloriqueando- L-Lo siento es que me quedé hablando hasta tarde con Norman~.

-Agh, debí de haberle dicho a ese Norman que no te molestara ayer en la noche o ayer en todo le día.

-Ah, eso, ah, yo en ah, lo siento ah. -estaba agitada e intentando recuperar su aliento ya cuando estaba en la estética en la puerta y enfrente de xx.-

-Por fin Emma, Anna fue por unas pastillas para los nervios, se le estaban acabando las uñas al no ver que llegabas.

-Perdón Gilda. -Cabizbaja. Gilda solo suspiró, la jaló y sentó en una silla frente a un espejo, alzó su cabeza y le sonrío-

-Ahora dime, que peinado deseas.

-Haz tu magia Gilda. -Asintió animada, debía de ser rápida sino el novio ese desmallaría. Anna ya estaba en la puerta cuando las vio, casi caía de rodillas por el alivio que le había dado de ya verla ahí, faltaba 1 hora para iniciar con todo y Emma le faltaban algunas cosas, pero estas eran increíblemente rápido pero para Emma, bueno Emma siempre hacía una guerra con cualquier cosa. Gilda por fin terminó y dejó que Emma se viese al espejo.-

-Woow :o, en serio no puedo creer que estos pelos se hayan dejado peinar así de bien, y este sutil maquillaje es sombroso. Gilda muchas gracias por esto.

-Emma, yo solo quiero que seas muy feliz, y también me hace feliz que confiaras en mí para organizar algunas cosas de tu boda.

-Yo confío en mis amigos más que nada.

-Ay -llorando- E-Emma esto es hermoso y todo, pero... ¡llegarás tarde cabeza hueca! -gritando-

-A-Anna, sí ya voy. -La novia ya estaba lista pero a no ser de su vestido, eso le faltaba.

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CON EL NOVIO

-Norman tu- -Dijo Don-

-Listo. -ya tenía su traje puesto.-

-Entonces sus zapatos -Eran Thoma y Lannion-

-Listo. -Los tenía puestos y bien voleados sin mencionar que brillantes.-