CAP. 33

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-suene celular-... ¿Bueno? -un hombre con su madre estaban sentadas junto con una pequeña mesa de té en el jardín, hasta que recibió una llamada- ¿Norman?, ¿Estás bien?, Y el celular de tu padre, porque marcas por este número... -estaba intranquilo, algo malo había pasado- ¿Que, acabas de decir? Tranquilo, y-yo voy de inmediato.

-Hijo que pasa, ¿estás bien? ¿James y mi Norman están bien?

-No lo sé con exactitud, están en un hospital ya me mencionó la dirección.

-Entonces vamos a verlos rápido.

Se levantaron y fueron por lo necesario, para entrar al auto e irse hacia el hospital. En el camino nadie habló, era confusa esta situación y no querían pensar en nada malo, en absoluto. Llegaron lo más rápido posible y se bajaron, aún dudosos.

-Buenas tardes, disculpe, ha ingresado una persona con el nombre de James Ratri?

-Buenas tardes. Un momento..... Efectivamente, hace media hora ingresó por una herida de bala, lo están tratando en la sala de emergencia cirugía, en el segundo piso a la derecha ultima puerta.

-sorprendido- M-Muchos gracias.

-Mi pobres niños, vamos corre, no es momento de quedarte paralizado.

-S-si, vamos.

Tambaleantes y con miedo subieron por las escaleras y giraron a la derecha hasta que, en el fondo vieron a un niño albino siendo consolado por un señor con traje manchado de sangre. La señora Ratri, dejo de lado a Peter y fue corriendo a su nieto, él es el que más sufría, ver a su padre muriendo frente a sus ojos ni siquiera ella podría aguantar estar de pie. Cuando estuvo frente de ellos Norman alzó su vista y lo único que hizo fue en abrazar a su abuela, abrazarla hasta que esta pesadilla terminara. Mientras tanto Peter veía la imagen y le destrozaba, luego posó su vista a la puerta que llevaba a cirugía, cómo podía ser que su hermano estuviera ahí adentro... pero luego se le vino a la mente, que alguien con tanto poder no podría sobrevivir en este mundo y eso es ser es una presa fácil.

-Norman, solo tranquilízate un momento, y cuéntame que pasó, por favor hijo.

-Bien... -tomó una bocanada de aire y explicó todo... Al paso de 3 horas, los doctores salieron sudorosos y felicitándose, por su gran trabajo. Norman y los demás al ver eso, se aliviaron, James, tal vez estaría mejor para el día siguiente. Peter se acercó rápido y sostuvo al último doctor, que suponía era el que llevó a cargo el problema.

-Doctor, ¿estará bien mi hermano?

-un poco sorprendido, el Doctor pensó que ellos eran los familiares y con un poco de temor habló- Por el momento, se salvó. Pero, no lo sé, sinceramente no le doy esperanza de vida, de más de 2 meses.

-¿Qué?... -atónito-

-eh, pero solo es mi punto de vista... -aclaró- Era como si la bala tuviera algo raro dentro, algunos órganos no tenían el color natural, lo bueno es que logramos quitarlo y ya no se expandió mas allá. Programé una cita con el doctor a cargo de revisarlo.

-Bien, muchas gracias doctor.

-Muchas gracias.

-Lo lamento mucho, y sinceramente espero que mi conclusión sea una mentira. -se retira-

-...Abuela, tío, ¿es mi culpa?... -sollozando miró a su familia, era él el culpable, ¿verdad?...-

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