12▪︎ La fiesta de disfraces I

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Interactúen mucho con este capítulo, así me animan, y les traigo el otro muy pronto.

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-Te vez, adorable -Harry murmura, mientras se da un último vistazo en el espejo.

-Flynn Rider, es un ladrón, se supone que no debería de lucir "adorable" -Johan, se queja.

Mirándole, por el reflejo del espejo, Harry no puede negar que el disfraz le sienta de maravilla. Sin embargo, y pese a que lo intentó Johan no da el tipo de bandido, jugador, como había planeado verse.

-Es genial así, no tienes que ser un chico malo, para verte bien -Harry, insiste.

Todavía dudando, camina unos cuantos pasos, y se detiene detrás de él. Y, aún cuando Harry es, considerablemente alto. Al lado de Johan se siente mucho más pequeño.

-Estoy seguro, que seremos la pareja más dispareja de la fiesta -murmura, con una sonrisa divertida, se inclina, y deja un beso efímero en el cuello de Harry.

Harry encoge los hombros, poco preocupado por aquello. Lo cierto es que, a pesar de que al principio se sintió un poco inseguro, y sin sentido, tener a Johan, contrarrestando con positivismo todas las cosas negativas, hicieron que ahora, mientras se ve reflejado en el espejo, no haya nada que interfiera entre como se siente, y la confianza que tiene en sí mismo, vestido de una manera en la que su padre odiarla verlo. Si lo piensa un poco, a Harry a dejado de importarle, pese a que muchas veces intento complacerlo, fue sumiso, y obediente, en el mejor de los casos recibió una escudriñada mirada. Así que, esta bien si a decidido ser desobediente por esta vez, después de todo, no cree tener tan mala suerte.

-Estás, precioso -Johan dice, tardíamente.

Con una sonrisa iluminada, Harry vuelve a observarse en el espejo. Mira a Johan sostenerlo, mientras su mirada cálida le expresa sin palabras, todo el cariño que siente, y se desborda el amables acciones.

-Gracias -susurra.

Sin querer sonar narcisista, objetivamente, Harry se siente, y se ve lindo. Esta usando un conjunto rojo, de látex, que se adhiere, perfectamente a las curvas de su cuerpo; sus muslos lucen más torneados, por lo que a simple vista parece tener una cintura más pequeña. Sobre el, lleva puesta una capa negra con detalles en dorado, que cae delicadamente sobre sus hombros, y aunque cubre gran parte de su cuerpo, incluso de sus botas de plataforma, eso hace que al resto del traje no parezca un simple trozo de tela.

En cuanto al maquillaje, le tomo un tiempo decidirlo, pero al final decidió hacerse un degradado de colores oscuros en los párpados, con los pómulos remarcados, mientras que a sus labios les dio un aspecto pálido, casi rozando lo enfermizo, finalmente, uso una diadema de cuernos curvos, acentuada en el nacimiento de sus rizos, sueltos.

-Andando, que estamos tarde -Johan anima, dándole una palmada en la parte externa del muslo izquierdo.

De camino a la fiesta, Harry, no puede evitar pensar en un par de cosas, concretamente en Louis. A pesar de que sus interacciones se redujeron al punto en el que es incómodo, incluso cruzar una mirada, él no puede evitar sentirse desanimado, piensa en el más de lo que le gustaría, quiere cosas, quiere sonreírle de nuevo, quiere saludarlo en las mañanas, quiere decirle que es un idiota, quiere que él lo necesite tanto, con tanta intensidad que sus pensamientos lo hagan sentir abrumado, y, al mismo tiempo, desea que esta etapa termine, parpadear, y que todo este insensato dolor, no sea más que un desabrido recuerdo, uno de tantos más.

Lucha a cada minuto para mantenerse lejos de sus angustiantes pensamientos, sin embargo, su infelicidad está tan latente, que resulta imposible. Lejos de casa tiene que fingir que no está sintiéndose, verdaderamente mal, apuesta una sonrisa cada vez que alguien está a su alrededor, y aún con ello, aún cuando a intentado convencerse de que nada puede ir peor; su optimismo no hace más que recordarle que esta creando barreras para dejar de sentir que cada bocanada de aire que toma, es igual de dolorosa como los sucesos que tienen marcado en el corazón.

SEDIENTO|  L.S Donde viven las historias. Descúbrelo ahora