"No fuiste mi primero, ni yo tu primero pero fuiste y eres el único que quiero"
Ya no me extrañas—RusherKing ft. Luck ra
Zabdiel suspira y aparta la vista cuando observa a Christopher acercarse a él. El castaño le da un sonrisa amistosa y finalmente camina hacia a lado de Richard, observa como toma la mano del moreno y entrelaza sus dedos.
El corazón de rubio duele pero ignora el dolor, su relación con Christopher habia terminado hace un año y algunos meses pero él seguía estancado sin poder dejar ir al ecuatoriano.
Siente una palmada en su hombro y mira a su costado donde Joel le da una mirada triste, el boricua se encoje de hombros y ambos caminan hacia su próxima clase.
La siguiente hora transcurre entre las voces de sus compañeros quejándose, el profesor explicando un nuevo tema y Zabdiel pensado si podría haber hecho algo diferente con Christopher y aun así seguir juntos.
Joel tocó su hombro y el rubio se percata de que son los últimos en el salón, su mente viajo a Christopher y así ha sido desde que terminaron.
—No es sano que sigas así Zab—comenta el rizado mientras caminan hacia la cafetería de la universidad.
—¿Por qué es tan sencillo para él?
—No lo sé Zab—contesta mientras decide entre un pastelito de chocolate y vainilla.
El puertorriqueño sabe que su mejor amigo va a demorar eligiendo su postre por lo que decide buscar una mesa.
Camina unos cuantos pasos y encuentra una que está vacía, su mirada se encuentra con la del pelirrojo y se queda quieto.
—Hola Zab.
—Richard—contesta y mantiene su agarre en su charola. Observa a Christopher llegar y dejar un beso en la mejilla de su nuevo novio—. Adiós.
Voltea rápidamente sin esperar respuesta y busca otra mesa vacía, se sienta en un silla y deja su charola sobre la mesa.
Observa Joel sentarse a su lado, ambos comen en silencio.
El mexicano no tiene que preguntar porque lo ha visto todo y Zabdiel no quiere hablar de como su corazón aún está roto.
—¿Crees que pueda recuperarlo?
Joel hace una mueca—. Él se ve feliz Zab, tal vez las cosas debieron suceder así.
De Jesús asiente y continúa comiendo, Joel tenía razón Christopher se veía feliz con Richard.
Él había arruinado su oportunidad con él castaño y ahora alguien más se había adelantado y había conquistado al ecuatoriano.
—Él me odia, ¿verdad?
—No creo que sea tan así—murmura—. No terminaron bien pero no creo que Christopher sea capaz de odiar a alguien.
Zabdiel solo se queda en silencio, Christopher es el ser más puro y bueno de todo el universo.
(...)
