Christopher camina rápidamente hasta el baño y se arrodilla frente al inodoro donde vomita todo lo que acababa de comer.
Zabdiel se coloca a lado del castaño y acaricia su espalda, le extiende una toalla limpia y Christopher limpia su boca.
El boricua ayuda a su novio a levantarse, caminan hasta el lavabo y Christopher lava sus dientes.
Al finalizar apoya su cabeza en el pecho del más alto y suelta un suspiro.
—Odio vomitar.
—Lo sé amor—acaricia el cabello del más bajo—. Creo que fue esa combinación que hiciste en el desayuno.
Christopher golpea el pecho del más alto—. No critiques mis combinaciones.
Ambos caminan hasta la habitación y el castaño se recuesta en ella. El ojicafe deja un beso en la mejilla del castaño y conecta sus miradas.
—¿Estas mejor?
—Un poco—contesta cansado y siente las manos de su novio sobre su aún plana barriga—. ¿Cuándo tenes que ir a la clínica?
—Dentro de unas horas—responde y roza sus narices—. Te llamo cuando me entreguen el resultado, ¿si?
—Me aterra saber el resultado—habla mientras Zabdiel lo abraza.
—También lo estoy cariño pero finalmente vamos a dejar esta duda atrás.
Christopher se queda en silencio mientras apoya su oído en el pecho del boricua escuchando los latidos de su corazón.
—Me gusta escuchar los latidos de tu corazón.
—A mi me gustas tú—el rubio sonríe y se aferra al más alto.
—Te amo Zabdi.
—Te amo mucho más Chris.
(...)
Zabdiel mira con cansancio y enojo a la persona sentada frente a él, realmente no sabe que pretende con todo este teatro que está montando.
El médico de acerca a ellos y le entrega un sobre con los resultados. Zabdiel lo toma agradeciendo al medico y éste se retira.
Abre el sobre y comienza a sacar el papel lentamente, comienza a leerlo hasta que finalmente observa la letra negrita que resalta en el papel.
Negativo
Una sonrisa sale de su boca, sabía que no podía ser padre de ese bebé.
Su familia es Christopher y su novio va a hacerlo padre dentro de 8 meses, le entrega el papel a la mujer y ésta se encuentra avergonzada.
El más alto le da una mirada fría—. Espero que con esto me dejes a mi y a mi familia en paz.
Sale de la clínica y se dirige a su auto, sube y comienza conducir hacia su departamento.
Unos minutos más tarde llega, abre la puerta y sale del auto. Saluda al portero de su edificio y se dirige al ascensor, presiona su piso y espera pacientemente.
Finalmente las puerta del ascensor de abren y Zabdiel sale de él caminando hacia el departamento que comparte con su novio.
Mete la llave en la cerradura y abre la puerta, camina hacia su pequeña sala y Christopher se encuentra allí con su pijama de ositos.
Los ojos mieles se posan en la figura que acaba de entrar y le da una sonrisa.
—¿Cómo te fue Zab?
—Muy bien amor, no es mi bebé—contesta y Christopher salta a sus brazos tomándolo por sorpresa.
Zabdiel sonríe y abraza con fuerza a su pequeño novio.
