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Christopher sonríe al sentir los labios de Zabdiel dejando un beso en su hombro desnudo.

Las manos del boricua rodean la cintura del mayor, impidendo que se levante.

—Zabdi, tengo frío—protesta el mayor haciendo un pequeño puchero.

—No quiero tenerte lejos de mi—contesta el peliazul, mientras apoya su rostro en el hombro del ecuatoriano.

—Cursi—murmura y ríe.

—Solo con mi bebé—deja un beso en el cuello del rubio. Suelta la cintura de Christopher y observa al mayor buscar un buzo, sonríe al ver que decide colocarse su buzo rojo.

El rubio vuelve al sofá con el boricua, se acurruca en sus brazos mientras Zabdiel se recuesta en el sofá.

Su día libre lo habían pasado juntos, su ropa había desaparecido apenas habían cruzado la puerta del departamento del ecuatoriano.

—¿Amor?—Zabdiel habla pero Christopher no le contesta, observa a su novio dormir sobre su pecho y sonríe.

Deja un beso en su cabello, su teléfono suena y Zabdiel maldice por lo bajo. Su teléfono está en el bolsillo de su campera, la cual está tirada en el piso de la entrada del departamento del ecuatoriano.

Cuidadosamente quita a Christopher de su pecho y lo deja delicadamente en el sofá.

Busca su ropa y se viste rápidamente, busca campera, abre el bolsillo y saca su teléfono llevándolo a su oreja.

Richard le habla del otro lado de la línea, invitándolo a un concierto. Zabdiel lo rechaza amablemente, argumentado que ya tiene planes con Christopher.

Se despide y decide cocinar algo para cuando Christopher despierte, busca los ingredientes en la cocina de su novio.

(...)

Christopher despierta lentamente, observa que se ha quedado dormido en su sofá, se levanta quitando la manta que lo cubre.

Camina hasta la cocina donde Zabdiel esta concentrado en su teléfono. Sonríe y se acerca lentamente hasta la encimera de la cocina y de un pequeño salto se sienta sobre ella.

Zabdiel levanta la vista y sus ojos repasan lentamente las piernas desnudas de su novio.

Christopher suelta una risa divertida mientras el peliazul se acerca lentamente hacia él.

—Pensé que te habías ido.

—¿Pensaste que ibas a dejarte?

—Tal vez tenias cosas que hacer, oí tu teléfono.

—Solo era Rich.

—¿Todo esta bien?

—Si, solo nos invitaba a un concierto pero le dije que ya teníamos planes—le da una mirada lujuriosa al ecuatoriano.

Christopher se sonroja mientras Zabdiel se acerca y deja varios besos en su cuello.

—Zabdi.

One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora