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La mañana fue cálida dándole la bienvenida a una tarde brillante y fría, apresar que hay un sol luminoso el clima se mantiene frío.
En estos momentos se encuentra solo en el departamento acompañado de su peluche de felpa de un conejo negro, ese mismo peluche que Yoongi le regaló en su segundo aniversario junto con un rramo de tulipanes y una caja llena de fresas.
Toma una manta de algodón para cubrir sus piernas del frío, se encuentra en la sala esperando a Yoongi para poder dar por comenzado su maratón de series. El pelinegro salió del departamento para ir a comprar palomitas, refrescos y por petición de él unas galletas de chocolate.
Abraza a su conejito dejando que la suave textura del peluche lo calme de las náuseas. La última vez que sintió estos síntomas fue cuando se enfermó de un empacho por comer un sinfín de golosinas a media madrugada. Las nauseas del embarazo no son muy seguidas pero si son molestas porque de una vez que entra al baño no sale de ahí está sentir que su estómago ya no tiene nada por expulsar.
Sus párpados se quieren cerrar por el sueño, despacio se desliza del sofá para quedar acostado ocupando el peluche como almohada cierra sus ojos para así entrar al mundo de los sueños.
Su respiración es tranquila el frío de la tarde hace que arrime más la manta para taparse hasta el cuello e inconscientemente comienza a repartir unos suaves masajes en su vientre que poco a poco irá creciendo.
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En cambio por el lado del pelinegro camina más rápido pasa así llegar al departamento, cruza la calle para pasarse al otro extremo de la banca, pasa por el parque está cerca de su departamento.
Escucha los gritos y las risas de los infantes quienes están jugando en los columpios y toboganes sin embargo se detiene al ver como un cachorro está corriendo hacia su dirección como también puede apreciar a un niño correr y quien supone es el dueño del animal.
Cuando el cachorro quiere esquivarlo Yoongi se agacha y lo toma por la correa que el animal lleva arrastrando y ese momento el niño se detiene frente a él con la respiración agitada. Toma al perrito en sus dos brazos dándole masajes en sus ojeras.
– Gacias señol – la dulce y apenada voz del infante de aproximadamente tres a cuatro años hace que quite la mirada del animal en brazos.
– No es nada pequeño – sonríe sin despegar sus labios.
– Molly te dije que no colielas.
Yoongi sonríe tiernamente al ver como el chiquillo regaña a la cachorra quien le contesta con un ladrido para después saltar de los brazos de Yoongi e ir corriendo hacia otra dirección donde se encuentra una chica.
Yoongi puede ver como la cachorra es tomada por los brazos de la chica quien se dirige hacia donde están ellos.
– Dohan que te he dicho de salir corriendo cuando Molly se escapa – la joven regaña al niño que ahora conoce por Dohan para posteriormente darle hacer una reverencia y saludarlo.
– Disculpa mi descortés, Soy... – la joven no termina de hablar ya que una voz masculina se hace presente.
– Amor.
Esa voz hace que Yoongi volteé a ver hacia su espalada y vea al tipo.
– Esto debe de ser una broma – espeta el chico – Min Yoongi, que casualidad – ríe sobando sus sienes.
En este momento Yoongi es atropellado por los recuerdos de hace dos años, esos recuerdos de Jimin y él en Busan después de que el menos fuera dado de alta del hospital. Ese mismo día donde el "otro padre" de Mía se hizo presente alegando que Jimin aborto apropósito a la bebé.
Ese día él y el otro sujeto que conoció por nombre Kai pasaron un día en la cárcel por ocacionar una pelea en el hospital. Pero a decir verdad no se arrepiente de aver estado arrestado. Ya que le propinó una golpiza al moreno por aver dicho y tachado el nombre de su amado Jimin de ser una zorra y un fin de vulgaridades, ese día le dejo en claro que sí se volvía a meter con Jimin no habría cárcel que lo detuviera.
– Kai no mentiré que no es un gusto de volverte aver – escupe con odio.
– Ohh, vamos aún sigues enojado – Kai ríe tratando de poner una de sus manos en el hombro de Yoongi quien se hace para atrás para evitar cualquier contacto con el. – Eso quedó en el paso – dice yendo hacia donde se encuentra la chica quien los mira confundidos.
– ¿Ustedes se conocen? – pregunta.
– Oh, querida claro que nos conocemos – Kai sonríe pasando una de sus manos por la cintura de la chica y dejando un beso en los labios de la femenina. – Si con Min nos divertimos mucho en la cama con Jimin no? – Y eso fue lo único que basto para que Yoongi se retirará más enojado que nunca del parque dejando al chiquillo y la joven muy confundidos.
Mientras tanto el moreno tenía una sonrisa triunfal.
Quién podría pensarlo Min y mi iluso Jimin están juntos.
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