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Es Jueves está levantado desde muy temprano. Desde ayer ha estado con una sonrisa en su rostro, su corazón se siente cálido con una felicidad que le sale de los poros.
Yoongi le ha pregunto el motivo de su felicidad radiante a lo cual él le ha contestado "Mi sueño se está cumpliendo" sabe que no puede aguardar el secreto por mucho tiempo pero quiere ser algo especial para la noticia que dará.
Bueno tiene que ser una donde les diga a sus amigos y otra más íntima con Yoongi.
Unos fuertes brazos apresan su cintura con cariño, ríe por la cosquillas que hace la nariz de Yoongi en la parte sensible de su cuello, detiene las manos de Yoongi al sentir cómo estás se escabullen dentro de su playera.
– ¿Qué crees que haces? – se voltea quedando frente al pelinegro.
Se percata que el día de hoy no trae puesto su traje para ir a trabajar.
– Nada, solo quiero darte amor – dice pasando sus labios por el cuello del menor, acercándolo más a su cuerpo.
– Está vez no – ríe posando sus manos alrededor del cuello de Yoongi.
– ¿Porqué? – pregunta aún ocultado en la cobertura del cuello de Jimin.
Yoongi sube una de sus manos dando un suave masaje en la espalda de Jimin quien suspira por el delicado toque en su cuerpo.
– Está vez no – suspira encantado por la delicadeza. – Porqué la vez pasada tu desayuno se enfrió y me costó mucho trabajo hacerlo Yoon! – regaña haciendo un puchero en sus abultados y apetecibles labios.
La ronca sonrisa que escucha de Yoongi lo eriza por un momento para después ver los hermosos zafiros negros del mayor, esos hermosos zafiros que lo traen hipnotizado desde hace dos casi tres años de a verlo conocido en ese parque de Busan.
Lento y sin prisa se acerca estando de puntillas por la diferencia de altura posa sus labios en los más delgados, complacido por el toque de estos con los suyos. Las manos de Yoongi se posan en su cintura haciéndolo saltar y enredar sus piernas en la cintura del pelinegro, se sostiene de los hombros del mayor.
Su labio inferior es devorado con devoción y firmeza la cual le encanta, los pequeños toques en su cintura le fascinan , enreda sus dedos en la larga cabellera haciendo presión para unir aún más sus bocas.
El va y viene se hace más lujurioso la falta de oxígeno les dice que tiene que separarse pero no lo hacen, aún no...
Aún devorando uno los labios del otro deciden separarse para tomar aire y recuperarse.
Sonríe dejando pequeños besos en los delgados labios y en la mejillas pálidas, esto es mejor de lo que había imaginado o soñado. Vivir y estar disfrutando lo que llaman "amor" es extraordinario, le agradece a la vida y al destino por dejarle disfrutar de este sentimiento mutuo. Cómo también agradece por a verle puesto en su camino a una persona aún hombre como lo es Yoongi.
– Podemos dejar el desayuno para después y pasar a comernos otras cosas – exclama Yoongi con picardía repartiendo besos por su cuello y succionando en sus partes sensibles donde seguro dejará marca.
– No – dice separándose y bajando. – No prepare este hermoso y apetecible desayuno por nada – termina por dejar un ultimo beso en los delgados labios para dirigirse al comedor.
– Pero Minnie podemos comerlo después – propone.
– Dije que no Yoon – se escucha desde el comedor.
– Me vas ha dejas así – dice Yoongi viendo el bulto que se nota en sus pantalones de pijama.
– Puedes bañarte en lo que yo comienzo a comer este hermoso banquete – ríe comenzando a probar esas fresas con crema que preparo.
Últimamente tiene antojos de comer fresas combinado con otras cosas.
– Eres malo Park – bufa por última vez Yoongi yéndose a sentar a la mesa.
– Yo también te amo – exclama riendo para después dar otro bocado a tan rica comida.
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