The other part of me - Mech-x4 - Spyder y tú

12

— Eso explica porqué no alejó a Spyder. Ella sabía todo.

— Mark, no es el mejor momento. —le dijo Harris.

— ¿Estás bien? —me preguntó Veracity, mientras se sentaba a mi lado, en la... celda en la que Jamie nos había metido.

— Claro. ¿Por qué no lo estaría? La chica que me gustaba resultó ser el enemigo. Nos... mintió en la cara. Me mintió en la cara.

— Spyder, no le hagas caso a Mark. —me dijo Harris.

— No, tiene razón. Debí hacerles caso cada vez que me dijeron que había algo raro. Ahora todo tiene explicación. Por mi culpa estamos aquí.

— No es tu culpa, amigo. —me dijo Ryan.

— Sí, lo es. Si no... hubiera caído rendido a sus pies, luego del primer día en que la vi, nada de esto estaría pasando.

— Spyder...

— Ya dejen de hacerlo, ¿sí? Todo esto es mi culpa. No traten de hacerme sentir menos culpable. —dije mientras me levantaba, y me iba a una esquina.

Tanto tiempo tratando de... impresionarla, de tenerla cerca, de... que me viera como algo más que un amigo... Y todo fue mentira. Solo salía conmigo para vigilar a Mech-x4.

Ellos tenían razón. ¿Por qué una chica como ella aceptaría pasar tiempo conmigo? Solo me utilizó durante todo ese tiempo. Ni Cassie Park se atrevió a tanto.

— Hay que salir de aquí. —escuché que dijo Mark.— ¿Seguro que tus poderes no nos sirven?

— No. Es igual que con Jamie. Trato, pero no hay algo que... pueda controlar.

— Al menos... ya sabemos que tecnología era. —dijo Harris.

— Sí, una que siempre estuvo cerca de nosotros. Seguro es espionaje, porque... Mejor dejo de hablar. —dijo Veracity.

— Debe haber una forma de salir, y la encontraremos. Solo... hay que pensar.

Yo solo podía pensar en lo torpe que fui durante todo ese tiempo.

Aunque le... pidiera que los liberara, no me haría caso. Ya lo había dejado más que claro. Yo no le importaba. Pero... mi mamá sí. Así que... si lograba convencerla a ella de que Spyder era importante para mí, y que "misteriosamente" había desaparecido, junto a sus amigos... tal vez él... los dejaría ir.

Era lo único que se me ocurría. Sabía que Spyder no... estaba feliz con lo que había pasado horas antes, pero... todo tenía una explicación. Luego de que Jack los liberara, le... podía tratar de explicar todo.
Claro que iba a entender. Su... mejor amigo controlaba máquinas con la mente. ¿Qué tan diferentes era eso, de que yo fuera una humana biónica?
Todo... todo saldría bien, y... volveríamos a lo de antes, al menos entre él y yo. Jack podría controlar su chip, sin estar implantado en mí; y ellos serían libres.

Era... lo mejor que podía hacer.

Había dado miles de vueltas en mi habitación, mientras buscaba la forma más... convincente y rápida, de decirle todo a mi mamá. Luego de mucho pensar, creí tener la respuesta.

— No es tan difícil. —me susurré a mi misma, mientras abría la puerta de mi habitación.— Oye, mamá... sé que estás ocupada, pero... necesito hablar de esto contigo. Me... me gusta un chico. Sí, lo sé. Es genial, pero... él y sus amigos desaparecieron. Y... —estaba practicando que le diría, cuando la voz de Jack me obligó a detenerme.

— Tengo todo listo. Solo... necesito hacer unas últimas pruebas... Le prometo que no se arrepentirá. —¿Ahora qué pasaba? Él no dijo nada más, hasta unos segundos después.— Ay, Jamie, Jamie, Jamie. Gracias a ti... este negocio se cerrará lo más pronto posible. —¿qué negocio?— Pobre niña. Bueno, supongo que le compraré un perrito a tu madre, una vez que... logré controlar tu mente, con los poderes de ese tecnópata.

Él...
¿Por qué rayos confíe en él? ¡Volvió a engañarme! ¡Me hizo hacer todo el trabajo sucio, para que él pudiera... hacer todo todo mi contra! ¡Igual que la primera vez!

Traicioné... traicioné al chico que me gustaba, sin saber que él estaba involucrado, por él. Y... todo este tiempo fue un plan para controlarme.

Hasta aquí había llegado. Ellos... ellos también conocían a científicos, ¿no? Tal vez ellos si me ayudarían a... quitarme el estúpido chip.

Solo... había un detalle. Jack no podía saber nada de todo esto. También tenía que... perder el control total de mis poderes.

No tardé mucho en decidirme, y geo-salté hasta su laboratorio. Según él, yo estaba solo en mi habitación, así que... no sospecharía de mí. Porque... ya no tendría con qué rastrearme.

Me acerqué lentamente a su... panel. Desde ahí sucedía todo. Desde ahí podía... obligarme a usar mis habilidades, y causar interferencias. Eso era lo que tenía que destruir.
Solo... necesitaba una sola esfera láser. Una muy grande, y, en el instante en que todo explotara, tenía que volver a arriba. Así eliminaría cualquier cosa que me involucrara en... la destrucción de su laboratorio.