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— Me duele el cuello. Es... es el chip.
— Harris, dijiste que no funcionaba. —se quejó Ryan.
— No es eso. Me duele desde antes de venir aquí.
— Nos hubieras dicho. No estaríamos probando...
— Ok. No aguanto. Ya no. Ya para. —dijo Spyder de la nada.
— ¿Qué te pasa, amigo?
— ¿Qué te pasa a ti? Yo la vi primero. No es oficial, pero respeta.
¿Estaba celoso? Ok... no debería parecerme tierno, pero lo era. Hubiera tratado de grabar eso, si no fuera porque el dolor en mi cuello era horrible.
— Oye, solo quiero ayudar. Y creí que no querías saber nada de ella.
— Ay, vamos. Todos saben que no tienen que tomar en serio lo que digo cuando estoy molesto.
— Todo el tiempo, de hecho. —dijo Mark.
— No es el momento.
— Spyder, después nos encargamos de tus celos. Algo sucede con Jamie. —escuché a Harris.
Todos me miraron, y yo no entendía por qué.
— ¿Qué haces? —le preguntó Ryan.
— No soy yo... —y después todo cambió. Ya no estaba con ellos, estaba en... casa.
— Al fin. —escuché la voz de Jack detrás de mí.— Días intentándolo, y al fin funcionó.
— ¿Qué pasó? ¿Qué hiciste?
— Retomo el plan. No tener el laboratorio es un... gran contratiempo. Que esos niños escaparan, también es un gran contratiempo. Que la información desapareciera en la... explosión del laboratorio, también es malo. Básicamente perdimos todo. Pero... a veces es bueno volver a lo básico. —dijo moviendo una... tablet.
No, no otra vez.
— ¿No pudiste esperar a que volviera por mi cuenta? ¿Y si hubiera estado con gente?
— Últimamente llegas demasiado tarde. No estoy para avanzar a tu ritmo. Así que, ahora que estás aquí, comencemos.
— Ellos ya saben quien eres, y quien soy. No voy a poder acercarme.
— ¿En serio? Bueno, un poco de lágrimas, y será suficiente.
— ¿De qué hablas?
— Que les vas a mentir. Yo que sé. Inventanles algo. Soy científico, no escritor. Esa parte te toca a ti. Tienes que mantenerte cerca del chico con el poder. Los demás... no importan.
— No va a... —ahí comenzaron las fallas.
¿Por qué a mí?
— Lo bueno de lo básico, es que es algo que ya se controla al cien por ciento. Así que...
