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El reloj se movía normal, haciendo ese típico tic, tac

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El reloj se movía normal, haciendo ese típico tic, tac. El mundo volvía a avanzar como siempre, y ahora los ojos de JongWoo brillaban ante los 3 pequeños vestidos con enteritos decorados y sus colas y orejitas de gatitos que resaltaban en sus pequeños cuerpecitos.

- Tuve que cortar yo la ropa, aún no hay ropa de bebé para híbridos... - Contó MoonJo, teniendo frente a sus piernas 3 cachorritos híbridos sentaditos.

JongWoo los miraba atento y enamorado, tres cositas chiquitas con ojitos de limón, ¿de verdad los merecía? Realmente eran un regalo de la luna.

- ¿Los tuviste que nombrar tú solo? 

- Si, aproveché para no ponerle los feos nombres que me pediste durante el embarazo.

- ¿Feos? 

- Si, ¿qué rayos significa GyeongHui? No me gusta para nada...

- ¿Cómo los llamaste?

- Este es Haneul - Levantó a un pequeño de ojitos bien abiertos y curioso por su alrededor -. Mira que bonito, tiene tu nariz - JongWoo rió -. HwangJeon. - Tocó la cabecita de quien se había quedado dormido sobre el muslo del híbrido.

- Creí que no te gustaban los nombres largos.

- Es que SeokYoon se lo puso, además, abreviado a Hwanie suena bonito.

- ¿Y la pincesita? - Preguntó JongWoo mirando a la pequeña que jugaba con sus piecitos.

- Yuri.

- ¡Dijiste que los nombres que yo quería eran feos!

- Bueno.... ese si me gustó.... - MoonJo hizo un mohín.

- ¿Por qué Yuri y no GyeongHui?

- ¡GyeongHui parece nombre de palacio! Yuri significa lirio.... y los lirios son muy bonitos... y ella es muy bonita.... 

JongWoo sonrió y se acercó a gatas.

- Si, es igual a ti, por eso es bonita.

- Es bonita porque es ella... 

- Déjame cargarla.

- No, son míos.

- También son míos.

- No, salieron de mi pancita.

- MoonJo.

El nombrado se transformó y los bebés copiaron a su padre, entonces agarró a cada uno en su hocico y se los llevó.

- ¡MoonJo! - JongWoo fue tras de él.

MoonJo se ocultó bajo los muebles con sus tres gatitos maullando, sus ojos brillaban en la oscuridad, JongWoo se asomó y le frunció el ceño.

- No me hagas correr que estoy herido, déjame ver a mis bebés.

- Miau.

- Nada de miau, sal de ahí.

¡Hey, You! Lemon EyesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora