El joven de cabellos rosados se encontraba muy nervioso y feliz pues esa misma tarde tendría una ¿“cita"? con el de ojos inmensos y melena semejante a la de un león. Sin embargo todo eso se vería cruelmente opacado por la codicia y obsesión de la mujer que observaba de lejos la presencia de Akaza, quién caminaba enérgicamente hasta el hogar de Kyojuro.
April: — Vayan por él, lo invitaremos a un lugar muy especial.
Decía mientras su mirada retorcida seguía cada paso, cada movimiento, cada acción qué ese Jovencito realizaba inocentemente, que sin saberlo, era el objetivo principal de una persona que haría lo que fuera para tener a alguien y ese Alguien casualmente era aquél chico de cabellos dorados y alma de sol. Pasaron unos minutos, minutos suficientes que los empleados de April usaron para obligar a su víctima a subir a ese automóvil sospechoso, con ventanas polarizadas y sin número de matrículas..... Oh, no, ese muchacho estaba en serios problemas.
Por otra parte, Akaza no tenía contemplado qué la cita que tanto anhelaba no se llevaría a cabo pues cuándo estaba apunto de cruzar la calle para finalmente llegar al hogar dónde vivía su querido amigo, un fuerte golpe justo debajo de su nuca hizo que perdiera el conocimiento, provocando qué su cuerpo cayera sobre el pavimento para posteriormente ser llevado hasta un automóvil dónde lo esperaba una persona conocida, que al parecer no tenía sentimientos, es como si dicha persona ya estaba acostumbrada a hacer esas atrocidades. Cuándo el cuerpo inconsciente de Akaza ya estaba dentro del maletero de ese vehículo, el conductor dió marcha hasta una bodega dónde le esperaba algo peligroso....
Mientras tanto Kyojuro estaba esperando impacientemente a qué su amigo diera presencia en su hogar y así mismo irse antes de qué la noche cayera, pero no fue así. Pasaron las horas, mismas que se llevaban paulatinamente los ánimos del rubio qué solo pensaba en como reclamarle a Akaza su irresponsabilidad, pero lo que no sabía es qué algo terrible le había sucedido.
El día se convirtió en una tempestuosa noche que tenía consigo el cielo azul llorando por la lluvia que azotaba la ciudad y que de apoco, mojaba el concreto de las calles. El muchacho de mechas rojizas que aún se encontraba enfadado por la reciente cancelación de los planes que realizaría con Akaza pero intentó no darle tanta importancia, ya qué tal vez el joven que esperaba ansioso había tenido un compromiso de última hora, así que optó por ducharse y remplazar el ropaje formal que había preparado una noche anterior justo para ese momento y ocasión, con una pijama cómoda.
Justo cuándo estaba apunto de meterse a la cama para finalmente dormir, unos golpes torpes provenientes de la puerta principal de su casa, lo hicieron alzar una ceja en señal de Confusión “¿Quién toca a tales horas de la noche?” Se dijo el muchacho que no dudo en ir a ver de quién se trataba. Cuándo las yemas de sus dedos llegaban hasta la perilla de dicha puerta y su muñeca daba paso a rotarla para poder abrirla, sus ojos se encontraron con una escena espeluznante qué hizo estremecer a Kyojuro.
Era su querido amigo que tenía el rostro llenó de moretones, la ropa con manchas inmensas de sangre seca y una de sus manos posicionada en una de sus costillas.... Verlo de tal manera provocó qué Kyojuro quisiera llorar
Kyojuro: ¡¿AKAZA!?
Akaza: H-Hol...
Fue lo único que pudo pronunciar el de ojos dorados, antes de que su cuerpo débil se tambaleara, amenazando en caer justo en el suelo pero todo eso no se llevó a cabo pues los reflejos agudos de Kyojuro hicieron que tomará entre sus brazos el cuerpo de Akaza para así mismo dirigirse dentro de la casa.
¡Que le sucedió a Akaza!
En fin, lloré con este capítulo y solo es la base de la idea que planeó llevar a cabo
¡Buenas noches Queridos(as) lectores!
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Se quién eres. // Akaren.
FanfictionEn este momento comprendo absolutamente todo... Un nuevo comienzo, una nueva oportunidad para cumplir lo que el destino les arrebató en su antigua vida. Akaza y Kyojuro son dos grandes amigos que tienen sentimientos hacia el otro. Ambos se quieren...