× Hanma x Mikey

1.6K 82 12
                                        


-¡E-erees un idiotaaa!-refunfuño con fastidio Manjiro viendo con odio a su pareja-Depravado, sucio, p-pendejo de mierda, ¡Que vergüenza!

-Jaah, relájate amor, ni siquiera nos descubrieron.-suspiro relajado Hanma tecleando en su celular, haciendo un pedido improvisto de un bonito traje de conejito playboy que haría un hermoso juego con el bonito cuerpo del chico frente a el. No se encontraba poniendo mucha atención a la charla con su pequeña bolita de amor hecha odio.

-¡I-idiota!, ¡L-lo sé, pero fue horriblemente vergonzoso!-refunfuño con reclamo el rubio señalando con su dedo índice al hombre.

-Amor, ¿Me niegas que los disfrutaste?, ¿No es así como te gusta hacerlo? La adrenalina de sentir que podrían descubrirte teniendo un orgasmo o el sentimiento excitante de tu cuerpo desnudo ante algún transeúnte. Se que provoca un delicioso calor en ti, se también que te encanta como arremeto contra tu culo, lo sé, Manjiro.-el Shuji se levantó amenazante con su gran altura frente a Manjiro, ahora casi adultos y desde que fueron más pequeños, el rubio cenizo se mantuvo siempre más pequeño que el otro. Por tal oportunidad de dominación sobre el Sano, el más grande poso sus enormes manos en la cintura de Manjiro, apretando levemente está ejerciendo su "poder" sobre el más bajo.

-Agg... Tienes s-solo un poco de razón, yo disfruto demasiado lo que haces, es en demasía estupendo, a-aun así, no deberíamos hacerlo en público.

-Jaah, bien, lo tomare en cuenta. Pero, aunque es el juego que más te gusta, te limitas mucho, pequeño idiota.

-¡No quiero que nos arresten o algo por el estilo!

Manjiro Sano y Hanma Shuji son una pareja de jóvenes bastante juguetona, viven juntos debido a que su relación ya aprobada por los padres de ambos permitió que un apartamento sea comprado solo para ellos, en busca de mantener su relación hasta en un futuro, a la familia de Manjiro le agrada el más alto, y así sucede de la misma manera con el rubio y la familia del Shuji. Ambos son bastante excéntricos, antes fueron enemigos debido a su diferencia en el hecho de pertenecer a diferentes pandillas, por que si, fueron delicuentes juveniles que milagrosamente fruto de su rivalidad surgió un especie de interés que terminó por convertirse en atracción, como dicen por ahí: "Del odio al amor".

Tienen lo que se llamaría comúnmente como desviaciones sexuales, termino que se define como patrones de comportamiento sexuales cuya fuente predominante de placer no se encuentra en la cópula, sino en alguna otra actividad o cosa que lo acompaña, presentándose en ambos protagonistas con un Manjiro que disfruta el placer de ser sometido, inferiorizado y maltratado. Al contrario, Hanma disfruta el papel del dominante, le fascina y genera pura excitación la situación de tener a alguien bajo su mando, sometido a sus órdenes y propios placeres. Todo aquello, también incluía algunas filias, como el exhibicionismo, Y bueno, el suceso que precede a aquel reclamo es fruto de aquellos banales gustos.

Durante su estadía en el tren muy comúnmente estrecho y repleto de gente, después de una feria junto a ambas familias, en una esquina del transporte se podían apreciar ambos hombres, el rubio se encontraba entre la pared y el pecho de Hanma, quien sin pudor alguno, no dudó en comenzar a deslizar sus manos por zonas sensibles del más pequeño, a sabiendas de su preferencia por ese tipo de situaciones de adrenalina pura, que aún, no se habían tomado el tiempo de experimentar. Manjiro se retorcía entre los brazos de su pareja, en su poco espaciado puesto, avergonzado y ansioso por las consecuencias que suceden a los actuales actos.

Afortunadamente, entre el placer irremediable del momento que provoca excitación en el rubio, el tren se detiene, la luz es escasa, y poco se distingue entre los pasajeros apretados unos con otros. Por aquel movimiento brusco que provoco el detenimiento, Hanma introdujo "accidentalmente" dos de sus dedos en la entrada del Sano, quien asustado, tras un gemido fuerte entre la oscuridad por el fallo del tren, empujó a Hanma para después del otra vez funcionamiento del transporte, salir despavorido hacia los baños públicos cubriendo su erección, por la que ahora en casa replicaba.

𝐋𝐈𝐃𝐄𝐑 𝐏𝐄𝐍𝐄𝐓𝐑𝐀𝐁𝐋𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora