REFLEXIONES

Una reflexión sobre la muerte

Sobre si existe el más allá...

Hay muchos pensamientos (que con vergüenza debo admitir la mayoría son disonantes) que vienen a mi mente después de que alguien lanza una pregunta sobre la condición humana (que tema tan amplio) hace un par de días escuché en un video de YouTube del que no recuerdo el contenido ni el nombre del usuario y donde el expositor planteó una pregunta que se fijó en mi mente desde ese día:

¿Dónde estabas antes de nacer?

Después el "youtuber" repasó una serie de sucesos históricos, como las guerras mundiales en el siglo XX, las interminables batallas europeas en los siglos XVIII y XVIII (solo por mencionar en específico las guerras durante el periodo de estados nacionales- monarquías) o momentos históricos como la llegada del hombre a la luna, el Renacimiento, entre muchos otros eventos que conformaron al mundo tal y como lo conocemos (caótico, violento, tecnológico, desigual).

El argumento principal detrás de esa pregunta era plantear que, si no estuvimos "presentes" ni tampoco "conscientes" en los momentos que precedieron a nuestra existencia, entonces era muy probable (en esta línea de pensamiento) que la muerte sea igual a ese estado de "No existencia" de "No ser", y que una vez muertos volvemos al vacío.

Pero que significa exactamente estar "consciente", a pesar del amplio debate que existe alrededor de la definición de la "consciencia" (del que no sabemos qué es, ni como se originó) al menos tenemos una certeza en la que coinciden la mayoría de los estudiosos de la materia y es que nadie sabe lo que es.

El único acercamiento lo tenemos desde la neurología, rama de la ciencia médica cuyo estudio nos permitió entender las partes del cerebro que se activan durante el proceso de pensar o de las partes del cuerpo que cada hemisferio de nuestro cerebro controla, pero nada pudo decir de cómo se origina eso que la psicología ha versado extensamente como el Yo (sin recurrir a una explicación sobrenatural)

Esta introducción se resume en dos preguntas fundamentales que me parece puntuales abordar.

¿Qué si hay evidencia después de la muerte? NO (Ninguna verificable, ni que pueda someterse al rigor científico, hasta hoy)

¿Qué hay gente que afirma que hay vida después de la muerte o quiénes aseguran haber tenido una experiencia que ellos asumen es del más allá? SI y aclaro que, aunque la experiencia personal no es prueba irrefutable, no podemos descartar la vieja máxima de Sagan "La ausencia de prueba, no es prueba de ausencia" así que estamos en un verdadero lío, no podemos descartar el debate sobre el tema solamente porque no hay elementos que confirmen (hasta ahora) pero tampoco que nieguen la declaración si hay algo más allá de los sueños (vida).

Ahora analicemos las dos preguntas, al día de hoy, no existe hasta ahora ninguna prueba irrefutable ( me encantaría leer, escuchar o informarme sobre algún caso documentado y sin sesgos sobre alguien que haya experimentado un viaje al más allá, después de su muerte cerebral) por supuesto aquí quiero ser extraordinariamente respetuoso con los credos religiosos que afirman sobre la resurrección de un Mesías, ni tampoco estoy confrontando a nadie qué afirme tener conocimiento o haber experimentado que murió y fue al cielo, infierno, sitio etéreo en el más allá, aquí inserte cualquier lugar que guste (la experiencia personal no es evidencia de existencia).

Lo que creo del tema es que afirmar que hay algo más después de la vida, plantea una hipótesis in verificable, si existe un alma invisible (o si todos tenemos una) ¿dónde estaba antes de su avatar consciente? ("yo") en el pasado, y ese pensamiento podemos llevarlo al extremo y llegar a muchas otras preguntas ¿dónde estaban todas las almas de todos los millones de seres humanos, antes que incluso existiera la especie humana? ¿los dinosaurios tuvieron una? ¿Qué es el "espíritu" en primer lugar?

Existieron (existen) acaso un tipo especial de cuerpo inmaterial para nuestros antepasados más distantes o ¿cuál fue su papel (de espectador) en el origen del universo?

Todas estas son preguntas que no se pueden contestar sin una explicación que funde su razonamiento en un argumento sobrenatural (Dios y la incapacidad humana de conocer sus designios divinos), o una declaración de fe que acepte una creencia sin cuestionarla, repito no estoy haciendo un juicio valorativo sobre la creencia de nadie, solo presento un razonamiento basado en la evidencia aceptada hasta ahora sobre el más allá.

La obra de la extraordinaria Elisabeth Kübler – Ross es posiblemente la aproximación más cercana a la muerte, al duelo y sus etapas, esta doctora y psiquiatra documentó los cambios que experimenta el cuerpo humano en los primeros minutos de su deceso.

La doctora Elizabeth recopiló a lo largo de años de investigación sobre la muerte algunas de las vivencias más significativas del fenómeno, algunas tan impresionantes como personas que afirmaron tener una experiencia del más allá, algunos que incluso bajaron al infierno o que subieron al cielo (judeo cristianaos), en períodos donde se les consideró como clínicamente muertos a estos sujetos( aclaro la definición de "clínicamente muerto" varió con el tiempo), pero incluso en todos estos casos que podrían sonar como pruebas irrefutables de que hay algo más allá que este mundo material, hubieron sesgos de investigación, falsificación de datos (no estaban realmente muertos) además que ninguno de esos "viajes" pasó el rigor científico de la doctora, en todos los casos hubo una explicación consistente con lo que vivieron.

No sé qué hay más allá de la vida, pero me aferró en la creencia (doble pensamiento) en contra de la evidencia, y me imagino como lo hizo Borges en un paraíso idealizado como su Biblioteca atemporal, pero en mi caso quiero creer que el cielo es un bucle interminable del momento más feliz de nuestra vida.

La muerte es uno de los grandes misterios del universo, en una realidad (humana) como la nuestra donde todo está el conocimiento está en permanente investigación y se somete al rigor de nuestras propias herramientas así también la muerte también pasa bajo el velo de lo verificable.

Este es mundo dónde todo el conocimiento es susceptible de ser puesto a prueba y que la única guía confiable es movernos en dirección de lo que dicta la evidencia incluso si choca contra nuestro sistema de creencias.

Hay un anhelo en el espíritu de nuestra especie, tener la certeza que el eco de nuestra conciencia, aunque sea por un breve instante permanezca en los eones del universo, pero que este sea suficiente para reconocerse a sí mismo y al final desaparecer del mismo modo que llegó.

La muerte podría llamarse como el "no ser", o el dejar de existir, la vida eterna, el paraíso, el infierno (aquí inserte el lugar o concepto que usted prefiera) y aun así luchamos contra ella y su fatalidad.

Los seres humanos somos los únicos animales capaces de entender nuestra propia mortalidad e imaginarnos un mundo más allá del que vivimos.