REFLEXIONES

"Efecto Dunning-Kruger"

Hace un par de días miré un documental sobre la construcción de los edificios en Nueva York a mediados de los años treinta, me pareció fascinante la manera en cómo el narrador de ese documental explicaba con claridad la complejidad que hay detrás de la arquitectura de edificios tan grandes e impresionantes como aquellos, en ese momento recordé el tiempo cuando era un niño e imaginé que un día podría diseñar un edificio con la magnitud y complejidad de una estructura como esa.

En mi perspectiva infantil asumí que construir solo consistía en apilar ladrillo sobre ladrillo hasta formar una torre y después todo del algún modo se acomodaría, no había mucho que pensar, incluso creí (era un niño fantasioso) de que si yo supiera dibujar hubiera podido diseñar algo mejor, para cuando terminó ese documental me percaté de dos cosas:

1.- Lo profundamente ingenuo cuando era un niño

2.- Mi total desconocimiento sobre arquitectura, ingeniería y construcción, advertí la locura de mi presunción, en mis condiciones actuales ni siquiera era capaz de dibujar un plano de un estudiante de ingeniería, fui víctima del efecto Dunning – Kruger.

Analicé con calma la situación, pensé en el hecho de como un sesgo cognitivo tan obvio como ese puede pasar desapercibido, la facilidad con la que solemos sobreestimar nuestra propia capacidad y como esa falsa percepción puede engullirnos totalmente en el error, lo peor de lo anterior es de que no solemos darnos cuenta sino cuando se rompe ese "hechizo", o si (en el mejor de los casos) se logra escapar del mismo.

En la actualidad las redes sociales son capaces de viralizar cualquier contenido, tales como opiniones, posturas ideológicas, análisis de temas varios, y como todo producto está sumergido bajo el velo de su propia subjetividad.

Los actores de este crisol de voces son variados dentro del amplio espectro de la fauna humana, cómicos, políticos, "coaches" (motivacionales, de vida, financieros), intelectuales, filósofos, religiosos, opinadores profesionales, todos quienes en un momento u otro emiten juicios, presunciones, aseveraciones, comentarios, juicios y sentencias respectos de determinados temas de interés social, todos cubiertos bajo el velo de sus propios sesgos cognitivos.

En Occidente vivimos en un mundo que considera la libertad de expresión como uno de sus postulados máximos de convivencia democrática, también es cierto que hay posturas ideológicas y opiniones que pueden estar muy bien informadas, pero también (dentro de ese océano discursivo e informativo) están esas voces que pueden estar fundamentalmente mal informadas, sin conocimiento o llena de aseveraciones disonantes (doble pensamiento) que son resultados de la asimetría de una doble carga por un lado la ilusión de conocimiento y por otra la incapacidad de valorar su propia incapacidad para saber que no saben.

Hay una frase extraordinaria que no tiene un fundamento teórico, pero que contiene una intuición cotidiana que me parece absolutamente correcta "NO ENTIENDEN DE QUE NO ENTIENDEN" eso es lo que sucede con el efecto Dunning- Kruger, la sobre confianza que experimenta un individuo "x" sobre un tema determinado es inversamente proporcional a lo que desconoce sobre ello.

Ojo aquí no estoy tratando de hacer una apología sobre el argumento de autoridad ni de reivindicar un sesgo cognitivo sobre las bases de que solo un experto puede pontificar sobre un tema en específico, de lo que aquí hablo es el nulo pensamiento crítico proveniente de la falta de conocimiento sobre una materia determinada para convertir su discurso en un apalancamiento racional sobre la base del desconocimiento de cada una de las partes de un todo determinado (oficio, materia, corriente de pensamiento, etcétera) moviendo a quién padece este sesgo en hacer afirmaciones temerarias sin estar consciente de ello.

Generalmente "casi" nadie puede advertir ser una víctima del Dunning - Kruger sino hasta que logra estar en profundidad sobre el conocimiento relacionado con ese tema, y se da cuenta que no sabía mucho o nada, saber que no se sabe, es a mi manera de entender en el primer paso para tamizar esa percepción sistemática.

Sin embargo, una vez al tanto podemos ser capaces de revertir este sesgo cognitivo que además de peligroso puede ser vergonzoso.

Ser capaz de articular un argumento de un tema no es compatible con la hipótesis de que las afirmaciones vertidas sean consistentes con la realidad o la evidencia, sino solo son especulaciones de nuestra mente en las que el velo de la subjetividad recae sin que podamos alejarnos del mismo.

Estoy seguro que todos en algún momento subestimamos una actividad, ciencia o saber porque alguien mostró dominio sobre el tema y al mismo tiempo sobrestimamos nuestra capacidad sobre las mismas pensando que si fuéramos nosotros lo haríamos mucho mejor.

Leer mucho, pensar antes de hablar y reflexionar sobre lo que percibimos son las mejores herramientas para tener a raya el efecto Dunning Kruger (del que creo es imposible alejarse) por qué siendo honestos

¿Cuántos de nosotros no solucionamos el mundo en una mesa de café o echamos andar la idea más prometedora de la historia o nos creímos capaces de conseguir ese logro del que solo (según uno) hacía falta voluntad para conseguirlo?

El diablo está en los detalles...

Pese a todo lo anterior, tu opinión siempre es la mejor.