Secretos Mágicos

La manada

Me pare tarde al día siguiente, no sabia que hacer ni a donde ir, así que me quite la ropa y fui al baño que al parecer es de los lugares mas modernos que tienen aquí, tome una ducha ya que me hacia falta después de tantos días sin bañarme. No se como me fui a dormir a noche sin bañarme, pero estaba demasiado cansada y bebimos mucho vino, anoche viví muchas emociones y fue fascinante.

Desde que estoy aquí siento las emociones mas fuerte, casi como en Izkar, pero aquí siento una fuerza interior.

Después de esa ducha tan placentera me vestí, por suerte como he dicho mi estilo de ropa es bastante parecido al que usan aquí así que por suerte podría encajar a la perfección. Nadie me vino a buscar a la habitación como hacían en Izkar o en el reino del atlántico Sur, supongo que tengo que acostumbrarme a que aquí las cosas son un poco diferentes. 

- Buenos días Emily, como dormiste? - me pregunto mi abuelo cuando llegue a una de as salas del castillo donde veía entrando y saliendo personas. 

- Bien, por que no me despertaron si estaban todos reunidos? - le pregunte a mi abuelo cuando me di cuenta de que entre en la habitación en medio de una Reunión con varias personas.

- Estarías cansada después de dormir en el calabozo incómodamente, no quiera molestarte.

- Pero que bueno que llegaras Emily, íbamos a empezar la Reunión justo ahora, toma asiento por ahí. - me dijo Kiara y le hice caso, me senté en una silla al fondo de la habitación y empezó la Reunión.

Hablaron sobre ataques a las afueras de Himyar a poblados de la manada, uno de los representantes de otro clan comento que han desaparecido cientos de miembros de su manada y ya han empezado a encontrar restos de cadáveres de algunos miembros de la manada.

Hablan de esto como si fuera algo normal, al principio escuchar todas esas barbaridades fueron chocantes, pero como digo desde que estoy aquí no siento tanto miedo es como si algo me impulsara a querer enfrentar a lo que le hace daño a los míos.

Acabada la Reunión mi abuelo le pidió a Kiara que me diera un recorrido fuera del castillo. Fuimos caminando hasta el pueblo a las afueras del castillo, las personas trabajaban y se movían haciendo su vida de un lado para otro. 

Llegamos hasta una aldea a las afueras y la vida parecía a la de una época medieval pero hacia un contraste extraño cuando las personas se visten como en el mundo de los mortales, aunque aquí no usen tanta tecnología como allá. 

Conocí a la familia de Kiara cuando estábamos de vuelta al pueblo, su marido y sus 3 hijos, esta mujer es admirable, me conto que fue de las mejores de su generación y por eso llego a jefa de seguridad de Himyar un puesto nada fácil para nadie y por supuesto ya habían estado mujeres al mando, pero siempre resulta mas difícil si eres una mujer al mando de mucho hombres ya que como todo aquí las mujeres se suelen quedar en casa criando a sus hijos y los hombres son los fuertes de la manada.

También me conto que es normal que las mujeres luchen, nadie las juzga pero se lo ponen difícil, aun así ella tiene 3 niños muy lindos y parecidos a ella. Su marido por otro lado, le falta un brazo, lo perdió luchando contra Gouveis una especie de criatura que habitan por estas tierras altas y que su único pensamiento es matar y comer todo lo que se encuentren con vida. 

Los Gouveis viven en manadas como los lobos y hasta llegan a comerse entre ellos mismos, son seres prácticamente sin alma con sed de sangre y un hambre insaciables, se parecen a unos lobos y usan eso para engañar a los demás y luego se transforman en una bestia sin piedad y te matan en cuestión de segundos, suena muy aterrador y lo es, notas en miedo en los ojos de quien te cuenta esa historia y es increíble como no murió el marido de Kiara por lo que le dan gracias a los dioses.