Extra 20: Consejo

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— ¡Camilo! — gritando el nombre de su primo en cuanto lo vio a lo lejos, se lamentó al instante ese impulso, ya que el mayor al verla se echó directamente a correr a la dirección contraria ¿Quién sabía que es lo que pensó ese chico cuando lo llamo? Bueno, no podía pensar en eso ahora, por lo que inmediatamente a perseguirlo. Cuando al fin lo alcanzo, Mirabel estaba segura de que ya le habían dado por lo menos 2 vueltas alrededor del Encanto, y solo lo logro porque uso su arma secreta: "si no te detienes ahora... le voy a contar a Emmanuel", y como si se hubiera apagado el cambiaformas paro en seco, haciendo que Mirabel no pudiera detenerse a tiempo por lo que cayeron juntos al pasto; si la Madrigal era sincera no sabía que era lo que le contaría a Emmanuel, pero funciono así que tendría que agradecerle de alguna forma a su amigo.

— ¿Te puedes levantar? Lamento decírtelo Mira pero no soy Luisa — quejándose de su prima que aún no se había levantado, el Madrigal de una vez intento cambiar de tema — ya termine mis tareas y no he hecho nada estos últimos días, todo va bien —recitando todas las respuestas que creía que su prima le iba a pedir, el chico solo se confundió aún más al ver que Mirabel lo miraba cansada y algo fastidiada.

— No te llamaba por eso — entendiendo inmediatamente porque Camilo había echado a correr en cuanto la vio, Mirabel estaba realmente indignada con su primo ¿ya no podía llamarlo porque o si no creería que lo estaba mandando a hacer algo? Era ridículo.

— ¿enserio? — viendo como la menor asentía lentamente, el cambiaformas solo le dio una sonrisa inocente, también deseando que lo hubiera sabido antes no estaría tan cansado ahora. — entonces ¿para qué me buscabas?

— Tengo una... situación — el mayor no pudo estar más confundido por la cara y palabras de su prima menor, pues la chica era muy decidida y verla vacilar de esta forma con sus palabras era extraño, además que toda la cara de la menor se había puesto roja.

— No es sobre vestidos ¿verdad? — viendo que no le iba a tocar ser modelo por lo menos en las últimas horas, el mayor volvió a hablar —y me buscas a mi... porque... — viendo a la chica más extrañado, el cambiaformas se quedó esperando una respuesta, y no era su culpa; pues aunque la relación de ambos había mejorado enormemente pero ninguno de los dos tendía a buscar al contrario por ayuda, en el caso de Mirabel las personas que llamaría primero serian a Julieta, Bruno, Agustín, Alma, Isabela, Luisa o Antonio; y pues Camilo le contaría primero a Emmanuel, Dolores, Pepa, Félix y ahora también a Mariano en algunos casos; entre ellos pues simplemente no había salido una ocasión hasta ahora.

— Necesito ayuda en una situación... — repitiendo la frase, como si de alguna forma esto le diera fuerza, la menor miro a los lados, como si se asegurara de que nadie estuviera ahí, para luego tomar aire y cerrar los ojos mientras decía lo más rápido y sonrojada que podía — amorosa — esperando una carcajada que nunca llego, Mirabel fue abriendo los ojos lentamente mirando la expresión en blanco de su primo, el cual empezó a parpadear rápidamente para procesar lo que acababa de oír mientras seguía con la boca abierta.

— ¿Por qué yo? — llegando a esa sola pregunta, el cambiaformas no podía entender eso, ósea podía aceptar que su prima se hubiera enamorado, eso es normal, pero de todas a las personas que pudo acudir (las cuales algunas estaban casadas) ¿Por qué lo eligió?

— Porque mis papás me pedirían el nombre, conocerlas entre otras cosas, ademas que se pondrán re cursis, igual que la abuela; Isabela, Luisa, Antonio y el tío Bruno están totalmente descartados, y si tú le cuentas a tu pareja no lo va ir contando por todo el pueblo además que son la relación más linda que conozco — claro que la nieta menor de los Madrigal estaba lista para dar esa respuesta y eso es porque ella misma se las había hecho la noche anterior.

Camuflaje (Camilo Madrigal x Male Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora