Capítulo 19

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Cuando entró a su departamento encendió las luces y se llevó la sorpresa de que Jisung estaba despierto todavía y en la sala, esperando por él. Minho decidió restarle importancia y siguió con lo suyo, se quitó la chaqueta, dejó sus llaves en la mesa y Jisung lo observaba, ahora de pie y con los brazos cruzados, con una expresión de molestia.

—¿Quién era ese chico? –preguntó seco.

—Hola para ti también, estoy bien ¿y tú? –respondió Minho sarcástico, ignorando su pregunta.

—¿No me dirás quién era?

—Qué maduro de tu parte esperarme despierto para regañarme por salir con amigos –Minho se estaba molestando ahora, y en serio.

—¿Los amigos te abren la puerta del auto para que subas?

—Oh, también andas espiando, qué maduro eres.

—Minho, respon... –el rubio fue interrumpido.

—¡No! ¡Te voy a responder una mierda Jisung! ¿Tú puedes besuquearte y meterte con quien se te dé la gana y yo no puedo salir con mis amigos? ¡Eres increíble!

El ambiente en aquel lugar era tan tenso que podía cortarse con una tijera.

Jisung comenzó a dar vueltas por la sala con una mano en la cintura y la otra pasando por su rostro constantemente mientras escuchaba los gritos del mayor.

—¡Te besaste con mi mejor amigo y tuve que tragarme todo eso! ¡Te metiste con un maestro y con el chico que le gusta a tu propio amigo! –Minho no se reconocía en ese entonces, tampoco Jisung lo hacía, había estallado, ya no podía guardarse nada más.

—Minho, ya basta –pidió Jisung, pero el otro no le escuchaba.

—¿Sabes algo? ¡No me sorprendería para nada si me dices que tuviste sexo con alguno de ellos! ¡O quizás con todos!

Un fuerte estruendo trajo consigo un silencio sepulcral.

Minho llevó sus manos a su mejilla, la cual se sentía caliente gracias al fuerte golpe que había recibido. Lágrimas comenzaron a caer sin cesar. Por otro lado, Jisung cubrió su boca con ambas manos, totalmente arrepentido de lo que había hecho.

—Minho yo... Honnie l-lo siento, bebé yo no...n-no quería...

El castaño caminó a la habitación en silencio y cerró la puerta con seguro. Se quedó de pie frente a esta y unos golpecitos hicieron que se sobresaltara.

—Honnie, ábreme p-por favor... –un sollozo escapó de los labios del rubio al otro lado.

Minho se quedó en silencio. Había comenzado a considerar lo que Chan le había dicho hace unas horas. Pero el miedo a estar solo lo invadió y terminó olvidándose de eso.

—Minho...

—Déjame solo, Jisung –luego se puso de pie y se cambió para dormir.

Al estar frente al espejo logró ver en su mejilla una marca roja, se notaba de lejos que era una mano, ¿cómo se suponía que iba a ocultar eso y qué excusa daría cuando le preguntaran? Claro que no podía decir que Jisung lo había golpeado, todos lo odiarían y no quería más problemas.

—¿Qué le está pasando? Él no era así... nunca me había golpeado...

A la distancia lograba escuchar los sollozos de su novio y quiso abrir la puerta para ir con él, pero no lo hizo. Simplemente fue a acostarse.

Había perdido la cuenta de noches en las que se había dormido mientras lloraba.

my only [hanknow/banginho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora