A la mañana siguiente y fielmente al pronóstico del clima, el sol estaba escondido detrás de algunas nubes grisáceas y sus rayos se dispersaban vagamente por el horizonte.
Era una de esas mañanas donde no quieres salir de tu cama, aun así, Luka debía ir al instituto.
Dejó a su sobrina dormir un rato más, y sin hacer mucho ruido tomó sus prendas y salió de la habitación para dirigirse al baño.
En el proceso, movió su cabeza a los lados. Su cuello le dolía por dormir en el suelo pero eso había pasado a segundo plano cuando vió que Adrien no le había mandado ningún mensaje.
Quizá esa fue su motivación para despertarse esa mañana, asistir al colegio para saber cómo estaba Adrien.
Cuando llegó a la cocina para desayunar, encontró a su hermana ahí, con una taza de café en la mano y su celular en la otra.
Sus ojos estaban hinchados, y a su vez, parecía exhausta.
Luka estaba igual, le había causado insomnio la situación de la noche anterior.
—Buenos días —dijeron ambos al unísono.
—¿Cómo estás Juls?
Preguntó Luka, tomando la caja de cereal para dejarla sobre el comedor.
—Estuve pensando anoche —confesó ella, dejando el celular en la encimera para tomar la taza con ambas manos—. Le diré toda la verdad a Rose, después, intentaré llegar a algún acuerdo con Félix, es su hija y creo que no puedo evitar que la conozca, pero será bajo mis condiciones.
—Eso suena bien —respondió Luka, sacando la leche de la nevera.
—Ahora me preocupa Rose, ayer estaba enfadada y tiene buenos motivos para estarlo.
—Ella te quiere, estoy seguro de que entenderá tus motivos.
Le alentó el peliazul, dejando la leche sobre la mesa.
—Tú también pareces algo decaído, ¿todo bien?
—Adrien no responde mis mensajes, los lee pero no los contesta, supongo que está ocupado con algo, o no sé —divagó Luka.
—Bueno, pase lo que pase, sabes que me tienes a mí —Juleka le dió un abrazo a su hermano, quien lo correspondió, apoyando su barbilla en la cabeza de su hermana.
—Y tu a mi Juls.
[...]
Luka decidió faltar a la primera hora, le ayudó a su sobrina a alistarse para el preescolar y después, su hermana y ella salieron de casa a su rutina de siempre.
Cinco minutos después, Luka también saldría de casa, no obstante, al abrir la puerta principal con el celular en manos, se encontró directamente con otra persona, que iba a tocar el timbre.
—Por un momento pensé que te quedarías en casa todo el día.
—¿Disculpa? ¿Te conozco?
Preguntó Luka, consternado por la confianza con la que hablaba la chica frente a él.
—No pero yo sí, además es importante que hablé contigo.
Luka no confiaba en desconocidos, y mucho menos en chicas que se plantaban frente a su puerta, diciendo que lo conocen y que deben hablar urgentemente con él.
—¿No puede ser después? Justo ahora salía rumbo al instituto y ya se me hizo tarde.
Luka intentó ser sutil, sin revelar mucha información.
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OPUESTOS//FINALIZADA
FanfictionDos chicos estudian en la misma preparatoria. Ambos son completamente opuestos. Pero, ninguno de los dos había escuchado la frase popular de "los opuestos se atraen". Al menos no por ahora.