10 ✝

8K 709 343
                                    







Isabel: Vayan con cuidado, yo debo ir a con tu tía, ______, no des problemas.

- Si...

.

.

.


Caminabas tranquila a lado de Yuno por la calle, el te había recogido para ir a la iglesia.

Yuno: Definitivamente ese vestido te queda muy bien, _____.  - dijo de repente.

- Gracias... Humm, mi abuela lo hizo, ella sabe mucho de estas cosas.

Yuno: Eso es lindo, yo también he estado yendo a un club de costura y apenas estoy aprendiendo.

- Supongo que es un pasatiempo entretenido, con eso, conseguirás un buen trabajo si te lo propones.

Yuno: Es verdad, pero - suspiró - mis padres quieren que me dedique al evangelio y predicación, y no a una "cosa de mujeres". Digo, cualquier persona funcional debería saber de eso.

- Estoy de acuerdo en eso y, tienes mucha razón, es algo para todos y no especi- - detuviste tus palabras al ver a un muchacho parado a lado de ti, apuntando con un fierro a Yuno.

Yuno: ¿Y el?...

Inui: Se supone que tú eres de Taiju. - te miró con un semblante serio - y tú - miró a Yuno de la misma forma - no deberías entrometerte en relaciones ajenas.

Yuno: ¿Disculpa?

- ¿De Taiju? - reíste.

Yuno: No lo comprendo, ¿Por qué ella no debería tener amigos?

Inui golpeó con fuerza a Yuno, justo en la cabeza.

El cayó al suelo, aún estaba consiente, pero de su cabeza salía poca sangre.

- ¡Yuno! - gritaste asustada, quisiste ver a Yuno más de cerca, pero alguien te abrazó, impidiendo que movieras tus dos manos.

Era "Kokonoi", aquel muchacho que se juntaba con Taiju y que también habías mordido.

Inui: Más te vale no decir nada, Yuno. - lo apuntó con el mismo fierro.

Koko: ¡Ya! - te jaló hacia atrás, alejándote de Yuno.

Cerca de ustedes, había un edificio, fue ahí donde Koko e Inui te llevaron a la fuerza, dejando a Yuno ahí.

Kokonoi por su poca paciencia, te había dado dos golpes, uno fue en la mejilla y otro en la nariz, sacándote un poco de sangre, eso fue porque no dejabas de defenderte, como cualquier persona normal lo haría.

Inui: No la lastimes, se enojará.

Al llegar al segundo piso, ambos te aventaron hacia una sala, caíste de rodillas, te sentías mareada y asustada, también te ardía la nariz, la mejilla y brazos por la fuerza de Kokonoi.

"Imbéciles ¿Que hace ella aquí?" - Taiju habló.

Koko: ¡Sorpresa! Es tu regalo adelantado. - dijo bromeando.

Al escucharlo mientras recuperabas la respiración, dirigiste tu mirada hacia arriba, ahí estaba Taiju, mirándote. Estaba con los brazos cruzados, su uniforme rojo no faltaba.

Taiju: ¡¿Quién la golpeó!? - gritó con fuerza a los dos uniformados de blanco, estos no respondieron.

Taiju te extendió una mano, pero tú no accediste.

Blasfemia |  Taiju x Lectora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora