Ya he crecido (Tomioka Giyu x Kochō Shinobu)

En la noche

-¿Giyu?- dije mientras apartaba el pelo de su rostro. - 

-¿Shinobu?- dijo mientras habría lentamente los ojos y se giraba hacia mí.- ¿Qué haces en mi cuarto? ¿Por qué tiene una toalla en la cabeza? - se refregó los ojos para mirarme de nuevo- ¿Sigo soñando?- dijo mientras apoyaba una de sus manos en mi mejilla. -

-No, tonto, estas despierto. Te estoy cuidando porque estas enfermo, y esto - señalé mi cabeza- espero que no te moleste pero tome un baño y te robe algo de ropa. -

Fue entonces cuando me miro por completo y sonrió cálidamente.

-Claro que no me molesta- se sentó y nuestras miradas quedaron casi a la misma altura- ¿Has cocinado para mí?

-Sí, espero que tengas apetito, no hace mucho que se te bajo la fiebre.-

-Siempre voy a querer comer lo que cocines para mí. -

No pude ver con que cara me decía eso porque justo me había girado a buscar la comida, pero agradecí que él no pudiera ver mi sonrojo. Hice como que acomodaba algunas cosas mientras se me iba la vergüenza. Acomodé la bandeja sobre su regazo y después me senté a su lado, sacando mi plato.

-¿No vas alimentarme? -bromeo mientras levantaba una ceja-

-No estas tan mal como para que haga eso.- sople mi comida. -

-No lo sé, siempre podría empeorar. -

-Creo que iré a comer en la cocina- apoye la cuchara contra mi tazón mientras lo miraba.-

-No, conque estes a mi lado esta bien. - se río y empezó a comer sin reproche hasta que nuestros ojos volvieron a cruzarse- ¿Qué tal la ducha? -

- ¡Cof, cof!, ¿Qué? - me había atragantado por la pregunta. -

-¿Paso algo mientras te bañabas? - dijo un poco curioso mientras buscaba mi mirada. -

-No, todo tranquilo, me vino bien un poco de agua caliente... con... este frío.- la última parte había sonado a pregunta.-

Había estado evitando el contacto visual por lo que no me di cuenta que estaba sujetando su boca para no reír, volví a sentir mis orejas arder mientras buscaba cualquier escusa.

-¿Qué...? ¿Qué... pasa? - dije mirando hacia todos lados.-

-Perdón... pero es que pareces muy sospechosa. ¿Hiciste algo en la ducha? - acercó su rostro al mío.- 

-¡¡GIYU!!- le grité mientras le largaba un manotón. - oh, no- dije mientras trataba de sujetar los platos.-

Entre su risa y mi nerviosismo habíamos tirado todo sobre la cama. Traté de levantar todo rápido antes de que él pudiera quemarse, le di un empujó para que se bajara de la cama, mientras tanto Giyu seguía riendo entre la tos y algunos quejido. 

- Ve a bañarte- le dije mientras llevaba las cosas a lavar. - Hay más comida en la cocina pero no quiero que te enfríes.-

- Esta bien- paso por mi lado y besó mi frente- me gusta que huelas a mi. Bendito sea el baño que sabe cosas - dijo antes de desaparecer tras la puerta. -

-Idiota.- le grité. Por lo visto iba a estar sonrojada todo el tiempo que me quedara en esta casa.- Tonto. - 

...

 Giyu había entrado a la cocina después de su ducha, se le veía más relajado, llevaba un conjunto deportivo color gris, una tolla sobre sus hombros, su pelo caía sobre un poco sobre sus ojos y su nuca, y sus ojos parecían más azules que de costumbre. Giyu recién salido de bañar había sido un buen descubrimiento.