Capítulo 18

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Kai Chisaki alzó una ceja.

Su mano estaba sobre el pomo de la puerta que era su nueva habitación, pero lo noto en ese momento, cuando intento girarla, alguien lo hizo desde el otro lado, Kai miró la puerta un momento mientras retiraba sus manos con un poco de recelo.

Pensó que tal vez era Natala que había olvidado decirle algo, y había vuelto.

Se quedó parado esperando el siguiente movimiento de la persona al otro lado de la puerta, pero eso no paso, en realidad nada paso, frunció el ceño luego de 30 segundo hubieran pasado.

Al parecer la otra persona, no estaba después a abrir la puerta, con el ceño fruncido, y una sensación de molestia, extendió su mano y giró la puerta, luego la jalo hacia él, la puerta se abrió.

Y relevo a una chica estando al otro lado.

Kai la miró sin cambiar su expresión, con ojos increíblemente aburridos, solo la miro esperando sus palabras, ella lo miró.

— Ho-hola. — ella saludó con un leve tartamudeó, ella misma no estaba segura de por qué tartamudeó, nunca fue alguien de muchas palabras, pero tampoco alguien que dudaba cuando debía de hablar, se sentía nerviosa, y miró al niño esperando su respuesta.

— Hey. — él dijo un saludo casual, no fue especialmente familiar o emocionado, más bien era el tono que el usaría para alguien que acababa de conocer, ella no estaba especialmente dolida por esto, el siempre usaba ese tono, menos cuando lo tocaba con sin su permiso, en esas ocasiones ella podía sentir el enojo y la molestia en sus palabras, pero en estos momentos ella sonrió ligeramente.

— Vaya sigues siendo el mismo de siempre, ¿no?, Kai.

— Si, después de todo no hay ningún motivo para que haya cambiado.

El respondió mientras miraba detrás de ella, no pudo ver a nadie más. Kurome pudo sentir cierto nivel de incomodidad en esta reunión, se preguntó si se sentiría de la misma manera cuando se reuniera con su hermana, no, eso era imposible ella y su hermana siempre serian ellas mismas, y no había ningún motivo para que la situación entre ambas se volviera incomoda.

— Bueno, tengo que hacer algo.

— ¿algo?, pensé que Natala te había dado libre el resto del día.

— Sí, eso dijo, pero quiero empezar a entrenar lo antes posible.

— ¿es así?. — Kurome dijo mientras comenzaba a caminar al lado de Kai. — ahora que lo pienso, nunca te vi en otro lugar con que fuera en esa silla, ¿estuviste entrenando desde que no nos vimos?

Kai miro hacia delante, en realidad de cierta forma lo hizo, pero no entrenó ningún arte marcial, o arte de la espada, ni siquiera como usar un arma o lo que sea. Su único entrenamiento fue para satisfacer la curiosidad de estos tipos sobre su poder.

— Más o menos, soy más débil que tú, puedo decir eso al menos.

— Oh. — Kurome dijo, en realidad nunca había visto a Kai pelear, pero supuso que al estar encerrado de esa manera debía de ser alguien muy fuerte, después de todo ¿Por qué se tomarían tantas molestias para encerrar también a alguien si era débil?, pero el acababa de decir como si nada que ella era más fuerte. — Espera, ¿Cómo sabes que tan fuerte soy yo ahora?

Kai giro sus ojos y la miro.

— Lo supuse.

Kurome lo miro insatisfecha por esa respuesta tan casual.

— No deberías de suponer sobre el poder de los demás tan casualmente, eso podría costarte la vida. — Kurome lo regaño mientras inflaba su pecho, y sonaba orgullosa por esas palabras.

Overhaul en Akame Ga KillDonde viven las historias. Descúbrelo ahora