Algunos meses antes
Universidad de Almería
Jueves. 16.00. Derecho civil
- Perdona. ¿Cuándo es el examen? Es que no me estoy enterando de nada.
¿Creéis que una voz, unas simples palabras, pueden hacer que se te remueva todo por dentro?
Aunque no veas al dueño de esa voz.
Aunque no sepas cómo es físicamente.
Sólo escucharlo hablar y sientes que te falta el aire, que el corazón te bombea a mil por hora y que toda tu vida no significa absolutamente nada porque nunca habías escuchado esa voz hablarte.
Vale si, puede que sea una exagerada, pero es que no estáis escuchando esa voz. Es ronca y sexy a la vez. De esas que cuando te hablan te dan ganas de quitarte las bragas y de decirle a su dueño: haz conmigo lo que quieras baby.
Me giro despacio algo inquieta. Tengo curiosidad por ver quien se esconde detrás de esa voz. Y cuando lo hago, creo que ya me puedo morir a gusto.
Un morenazo de ojos marrones y piel ligeramente tostada me mira con algo preocupado mientras yo siento que todo mi cuerpo tiembla y como el aire a mi alrededor es más pesado y me cuesta respirar.Él no es guapo, no. Guapo es quedarse corta. Es el tío más bueno que he visto en mi vida. Que digo, creo que nunca veré un tío tan bueno cómo él. Estoy segura yo, y mis 18 años recién cumplidos.
Trago saliva mirándolo mientras él sigue con esa cara intranquila. Me ha preguntado algo. Lo sé. Piensa Luna, no es muy difícil. Lo sueles hacer a menudo, lo de pensar, no lo de ver a un tío bueno a menos de un metro de tu cara.
- Es el viernes de la semana que viene - le respondo con timidez. Me doy la vuelta para mirar de nuevo hacia la pizarra y lo escucho resoplar. Siento de nuevo su aliento cerca de mi oído y a mi se me eriza toda la piel.
- ¿Y hasta qué tema entra? - me pregunta él con la voz ahora más preocupada.
- Hasta las capitulaciones matrimoniales.
- Joder. Joder.
Lo escucho resoplar otra vez. Creo que ésta abriendo su carpeta porque escucho también el movimiento de papeles. Me doy la vuelta más por verle la cara de más cerca que por otra cosa. Tiene unos labios bastante gruesos y unas pestañas negras infinitas. Y joder. Huele de maravilla. Es un olor fresco y a la vez sensual.
- ¿Qué te pasa? -le pregunto girando mi cuerpo un poco más mientras lo veo sacar los apuntes a diestro y siniestro.
- Pues que me faltan 5 temas hasta las capitulaciones... -lo veo apretar sus labios y bufar cada dos por tres. Levanta su mirada y se cruza con la mía.
Sus ojos marrones se clavan en los míos con una intensidad que me hace soltar un pequeño jadeo. Nunca antes me habían mirado así. Como si el mundo se fuera a acabar en esa mirada. Si, de nuevo estoy siendo dramática, muy dramática. Lo veo abrir y cerrar sus ojos despacio sin apartar su mirada de la mía.
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𝑷𝒊𝒆𝒏𝒔𝒂 𝒆𝒏 𝒎𝒊
Teen FictionRodri, joven promesa del fútbol y estudiante universitario de Económicas. Luna, su compañera de clase. La primera vez que se aleja de su casa. De su lugar seguro. Unos apuntes. Una mirada. Una invitación... Y todo su mundo acabará patas arriba...