Del odio al amor✓ (EDITANDO)

Cap 38: La cena (parte 1)

(Annie)

—Soy Annie Wills y este es mi vídeo de presentación, espero les haya gustado y nos vemos muy pronto —guiño un ojo a la camara antes de pausar el vídeo.

Gruño de frustración mientras me suelto la trenza dejando caer mis ondas castañas. Siento como la ira sube cada vez más. Maldita sea, ¡Le dije! ¡Claro que le dije! Pero es un irresponsable estúpido que no puede tomarse en serio las cosas por una jodida vez. Envio el vídeo y casi de inmediato lo llamo por video llamada.

—No me mates, lo siento.

—Tú, jodido animal del monte, puta rata asquerosa de mierda, ¡Te dije que tenías que pasar el puto vídeo para el trabajo final! ¡¿Te lo dije o no Stiven?!

—Sí, bebé, pero...

—¡Pero bebé mis ovarios! ¡He tenido que hacer toda la exposición yo sola! ¡SOLA! ¡PORQUE ERES UN IRRESPONSABLE! ¡¿Sabes que pasará si me reprueban, Stiven?!

—¿Lo sé?

Asiento con una mirada asesina

—Lo sabes

Asiente con cautela.

—Lo sé

—Ahora, harás el jodido vídeo y lo mandarás, le dirás al profesor que se te murió tu abuelo y por eso lo envías tarde. ¿He sido clara, Stiven?

—Carajo, me pone mucho tu actitud toda cabrona.

—Aprovecha, porque si repruebo te quedarás sin bolas —tranco la llamada.

Acto seguido agarro una de mis almohadas y grito millones y millones de insultos, unos creativos y otros convencionales. Cuando siento mi garganta arder y mi respiración acelerada me aparto sonriendo a la visita que tengo en mi habitación el día de hoy.

Ellas me miran en silencio como si estuviera apunto de atacarlas, cosa que claramente haré si me vuelvo a alterar de esa manera. Les sonrio como un angelito, como si no acabara de perder la cabeza por una nota.

Es decir, no pueden culparme. Tenía que entregar el trabajo final del curso de criminalística que estaba haciendo y de ello dependía si pasaba la prueba o no, el vídeo era en pareja sobre todo lo que habíamos visto en las clases. Stiven tuvo la brillante idea de hacerlo conmigo... El trabajo, claro, pero es tan jodidamente irresponsable que ahora me arrepiento.

—¿Estás bien? —Lucrecia me pregunta con cautela. Le doy una sonrisa exagerada que las tiene a todas riendo, incluyendome.

Creo que fué un mal momento para hacer la tarde de chicas. Déjenme les cuento el chismesito; resulta que el día de ayer llegué a la ciudad, ¿La razón? Algo muy emocionante ocurrirá en la cena de hoy, algo que incluye a Ben. Recibí su llamada para contarme los planes que tenía y chille como una niña pequeña — luego de eso lloré junto a Cynthia en una llamada, lo admito— ¡La noche de hoy sería todo un espectáculo! ¿Adivinen quién es la organizadora? Exacto, este bombón.

Estaba tan feliz por Ben que me ofrecí a organizar todo, y así lo hice. Luego decidí que esa sería la excusa perfecta para volver a la ciudad, así lo hice también. Ahora solo faltaba arreglarnos porque en unas cuantas horas los chicos vendrían por nosotras. Así que por eso ahora tengo mi cuarto vuelto un desastre, con música de Harry Styles a todo volumen y con cinco chicas danzando en ropa interior por todo el lugar.

—¿Que mierda fué eso, perra? ¿Quieres que mi hijo salga antes de tiempo? —sonrio con diversión. Cynthia está sentada con la espalda pegada a la cabecera de mi cama, vistiendo solo ropa interior, su vientre de siente meses está bastante grande, ese niño será un jugador de fútbol americano o una mierda de esas.