Extra cinco.

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                     Luna de miel

(Annie)

Eagle beach, Aruba.

Es un lugar simplemente magico, es precioso, entra en la categoria de las mejores playas del mundo y según lo que una señora nos dijo; este lugar pertenece a un barrio de la ciudad de Oranjestad, que es la capital de está isla caribeña.

Es una suerte que mi esposo y yo hayamos decidido pasar parte de nuestra luna de miel en este lugar, solo estaremos cinco dias para luego ir a una playa de Brasil que ansio visitar. Apenas llevamos tres dias aqui y siento unas altas ganas de quedarme un mes entero porque ¡Hola! ¡Esto es como el jodido paraiso!

Lo primero que hicimos al llegar a la suite fué... Follar, ¿Para que mentirles? No habiamos entrado muy bien por esa puerta cuando ya Gus me tenia inclinada en alguna mesa, luego de eso, decidimos ir a algún restaurante cercano para almorzar y volver al hotel a terminar de descansar realmente, pusimos alguna pelicula y me acurruque contra mi esposo hasta caer rendida. En la mañana siguiente Gus estaba de nuevo entre mis piernas porque parece nunca cansarse de eso, tuvimos un delicioso mañanero para luego bajar a desayunar e ir a explorar un poco. Luego, mientras cepillaba mi cabello mojado por la ducha y veia a Gus dormir boca abajo en la enorme cama, caí en cuenta de una cosa ¡No habiamos ido a la playa! Y estabamos a un paso de ella. Pero como ya era de noche decidí esperar hasta que amaneciera para poder ir.

Esa noche dejé a Gus durmiendo y sali a explorar las instalaciones del hotel, era muy grande y lujoso, porque claro que el señor Parker no podia hospedarse en un lugar común. A él le gustaba lo caro.

Ese dia mientras caminaba me topé con dos venezolanos super amables que de hecho estaban de aniversario y decidieron celebrarlo en aquella isla. Mis nuevos amigos llamados: Maria y Luis, tenian 5 años de casados y según ellos pelear todos los dias era la clave para durar tantos años.

—Joder, eso tiene sentido —murmuré en ese momento.

Ya sabia que a Gus y a mi nos esperaban muchisimos años juntos.

Ellos sonrieron por mi acento que les parecia encantador.

—Chama, repetí eso de nuevo —Luis tenia una cara divertida.

Los dos eran divertidos, me gustaba como pronuniaban las palabras.

—No seas jala bolas, Luis —respondió su esposa.

Fruncí el ceño, ¿que era eso?

—¿Que significa?

Maria fué quien respondió mientras que Luis se reía a carcajadas, al parecer el coctel le estaba haciendo efecto.

—Coño eso tiene muchos significados y de verdad duraríamos un verguero de tiempo explicando.

Abri los ojos con sopresa, ¿dijo coño? Joder, si dijo coño.

—¿Coño e' la madre ahora que hiciste que la asustaste? —le reprochó su esposo haciendome reir.

—Lo siento, es que la palabra coño tiene otro significado en mi pais.

Entonces les expliqué y ellos rieron un montón al igual que yo, al final hablamos otro poco mas e incluso intercambiamos numeros de telefonos para quedar luego de que mi esposo se despertara.

Esa noche al regresar a mi habitacion habia conseguido a mi esposo en la misma posicion que cuando lo dejé, rodé los ojos cambiando mi pijama para luego acostarme y dormir prometiendome que mañana no lo dejaria dormir en todo el dia. De todas formas, la luna de miel tambien se trataba de eso, ¿no? De tomar un descanso de las preocupaciones, pero sobre todo, de disfrutar.

Del odio al amor✓ (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora